El Clan Biden ha estado en el ojo público por múltiples acusaciones por tráfico de influencias y evasión de impuestos. ¿El protagonista? El hijo del presidente de Estados Unidos, Hunter, quien junto a su padre, habría recibido miles de millones de empresas extranjeras a través de compañías creadas bajo la vicepresidencia de Joe Biden.
El Político
Ahora bien, está semana Hunter fue acusado en más de 56 páginas por fraude, en nuevos delitos federales que se ejecutaron en Los Ángeles, California. La decisión fue celebrada por republicanos, demócratas y denunciantes. Sin embargo, un experto legal que participó en los procesos de impeachment contra los presidentes Clinton y Trump, aseguró que los cargos presentados por evasión fiscal solo están diseñados para proteger a Joe Biden.
Jonathan Turley, es el abogado detrás de la acusación, quien en una columna de opinión para el New York Post, son una “maravillosa” jugada de distracción para que las pesquisas ya no vayan dirigidas sobre el presidente demócrata.
“Los pasos dados por Hunter para evadir impuestos son impresionantes, pero no tanto como los esfuerzos del Departamento de Justicia por eludir cualquier implicación directa para su padre, el presidente Biden”, escribe Turley, quien luego explicó cuáles son las principales omisiones del Departamento de Justicia en la acusación contra Hunter.
Burisma: ¿De dónde vino ese dinero?
Una de las empresas energéticas más grande de Ucrania eligió a Hunter Biden com parte de la junta directiva entre 2014 y 2019, mientras su padre era vicepresidente durante la presidencia de Barack Obama.
Según documentos y evidencias proporcionadas por su exsocio, Devon Archer, Hunter recibió más de 80 mil dólares mensuales sin tener experiencia laboral en el rubro de energía y gas. En esta trama de corrupción, se dice que la empresa habría pagado sobornos millonarios a los Biden para que estos se encargaran de frenar las investigaciones por corrupción contra la compañía ucraniana.
Sin embargo, de acuerdo a Turley, en la última acusación dirigida hacia Hunter solo se enfoca en cómo el hijo del presidente de Estados Unidos no pagó impuestos, en lugar de dirigir su atención en cómo ganó todo ese dinero en primero lugar. En ese sentido, señala que el Departamento de Justicia evitó por completo los pagos más controversiales antes expuestos.
Si bien esta acusación no ha sido comprobada, el Departamento de Justicia hizo que el caso prescribiera, sin dar una razón aparente, explica Turley.
“El reciente testimonio de los denunciantes del IRS sugiere que no fue un accidente. Los investigadores fueron bloqueados, afirmaron, y el Departamento de Justicia se estaba moviendo previamente a rechazar cualquier cargo contra Hunter Biden”, reseñó Turley, quien afirmó que una investigación sobre estos pagos habría puesto la lupa en el tráfico de influencias de Hunter y el conflicto de interés que representaban las acciones de su padre, quien intervino directamente para despedir al fiscal ucraniano que investigaba a Burisma, Viktor Shokin.
¿Hunter como agente extranjero?
El experto legal señaló en su artículo que Biden también evitó cualquier cargo como agente extranjero no registrado.
Turley explica que, recientemente, el DOJ acusó al senador demócrata Bob Menéndez de haber infringido la Ley de Registro de Agentes Extranjeros (FARA, por sus siglas en inglés).
“El problema de acusar a Hunter de FARA es obvio”, escribió Turley. “Abre interrogantes sobre los millones de dólares destinados a la familia Biden procedentes de fuentes extranjeras, un tema que el fiscal general Merrick Garland lleva años evitando”.
El socio que no es nombrado
Finalmente, Turley asegura que la acusación no menciona el hombre que era utilizado por Hunter Biden para concretar sus negocios en el extranjero: el propio Joe Biden, quien llamó, asistió a reuniones y mantuvo cenas con socios comerciales de su hijo en diferentes ocasiones con otro nombre.
“Al centrarse únicamente en la evasión fiscal, Weiss evita de nuevo cualquier referencia directa al foco del tráfico de influencias utilizado para recaudar estos millones de dólares”, escribió el experto legal. “Incluso sin mencionar al presidente, las implicaciones de la acusación son devastadoras para la narrativa y los desmentidos de Joe Biden”.