Cory Booker abandonó el lunes su postulación a la candidatura presidencial del Partido Demócrata, poniendo fin a una campaña cuyo mensaje de reconciliación no atrajo mucho apoyo en tiempos de gran ansiedad y polarización política.
El Político
Con su salida, el elenco de aspirantes demócratas, que fue en un momento el más diverso en la historia estadounidense, queda con un solo afroamericano, el exgobernador de Massachusetts Deval Patrick.
Desde que lanzó su campaña en febrero Booker, senador por Nueva Jersey, tuvo apuros para recaudar los fondos necesarios para una campaña presidencial.
Iba rezagado en las encuestas y no contó con el mínimo de respaldo requerido para poder participar en el debate del martes. Booker también faltó al debate del mes pasado y sus cifras en las encuestas no pasan de 10%.
En un email a sus partidarios, Booker dice que “entré en esta contienda para ganar” y que al no poder participar en los debates no pudo recaudar el dinero necesario.
“Nuestra campaña ha llegado al punto en que necesitamos más dinero para ascender y seguir construyendo una campaña que pueda ganar. Ese es un dinero que no tenemos y que es difícil de recaudar porque no participaré en el próximo debate y porque el urgente asunto del juicio político con toda razón me mantendrá en Washington”.
Nota de VOA