Las sistemáticas violaciones a los derechos humanos que ejerció el régimen de Cuba durante los últimos años con las misiones de médicos cubanos que envió al exterior quedaron en la mira de las Naciones Unidas y ahora serán elevadas para su evaluación al Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
El Político
En un lapidario informe de la Relatoría Especial sobre las formas contemporáneas de la esclavitud y de la Relatoría de Trata de Personas de la ONU se dejó constancia de la preocupación de esos estamentos de Naciones Unidas por los trabajos forzados, las “diversas formas de esclavitud modernas” y la persecución permanente que sufren los profesionales de la salud que Cuba suma para sus misiones especiales que envía el régimen castrista al exterior.
“Muchos médicos cubanos que trabajan en el exterior estarían expuestos a condiciones de trabajo y de vida explotadoras, pagos salariales inadecuados. Además, muchos de estos profesionales estarían sometidos a presiones y a seguimiento por parte del Gobierno de Cuba”, sostiene el informe de las Relatorías de la ONU en su introducción.
Se trata de una descripción de cómo funcionan las mismas misiones de médicos cubanos que ahora contratará la Argentina para combatir el coronavirus en un acuerdo para la atención en hospitales de la provincia de Buenos Aires.
A lo largo de un informe de 12 páginas datado en Ginebra el 6 de noviembre del 2019 y al que ahora tuvo acceso Infobae las Relatorías especiales de Naciones Unidas se hicieron eco de una extensa denuncia presentada el 10 de mayo del año pasado por parte de la ONG Prisoners Defenders y de otros grupos de defensa de los derechos humanos que alertaron sobre la situación de vulnerabilidad de los médicos cubanos en misiones al exterior.
Bajo la firma de Urmila Bhoola, Relatora Especial sobre las formas contemporáneas de la esclavitud y María Grazia Giammarinaro, Relatora Especial sobre la trata de personas de la ONU los informes sobre las violaciones a los derechos humanos por parte del régimen de Cuba en las misiones de médicos exige que en 60 días el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas se expida sobre “los mecanismos de queja existentes para profesionales cubanos que quieran denunciar abuso o explotación laboral y de qué manera dichos canales o mecanismos puedan ser accedidos desde el extranjero”.
Los informes de las relatorías de la ONU se sustentan básicamente en la denuncia presentada por Prisoners Defenders que preside desde Madrid Javier Larrondo y que presentaron 450 casos de médicos que a los largo de los últimos años sufrieron diferentes violaciones a los derechos humanos. Esa misma denuncia fue presentada por la ONG con sede en España a la Corte Penal Internacional de La Haya y será elevada ahora a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA.
En los 450 testimonios de médicos cubanos que presentamos se reiteran patrones de esclavitud moderna, vejámenes a los derechos humanos, falta de libertades y un sistemático esquema de trata de personas por parte del régimen de Cuba”, explicó Larrondo a Infobae al detallar el “arduo y difícil” proceso que tuvo que transitar para la recolección de datos que hizo a los largo de los últimos años con la idea de llegar a elevar estos informes en la ONU y en la Corte Penal Internacional de La Haya.
Las misiones de médicos cubanos funcionan desde 1963 y según cifras oficiales de Cuba más de 600.000 trabajadores de la salud han prestado servicios médicos en más de 160 países. Actualmente, unos 30.000 médicos cubanos estarían activos en 67 países. De allí el interés de las relatoras de Naciones Unidas por dar rápido tratamiento a las denuncias esgrimidas.
A la Argentina vendrán 200 de estos médicos cubanos para dar apoyo a los hospitales como ratificó el ministro de Salud, Ginés González García. Esto ya generó el rechazo de la oposición y de diferentes asociaciones médicas que entienden que la Argentina cuenta con suficientes médicos para atender la pandemia de COVID-19 y rechazan los mecanismos ejercidos por Cuba en estas misiones especiales.
Alioski Ramírez Reyes y Carlos Moises Avila, los médicos cubanos que abandonaron las misiones y ahora viven exiliados en Estados Unidos y Brasil, explicaron a Infobae los detalles de estas denuncias que también llevaron a la ONG Prisoners Defender.
En base a esos relatos y a otros 448 testimonios más se basó en gran medida el informe de las Relatorías de Naciones Unidas para detallar los siguientes puntos a tener en cuenta y denunciar de parte de estas misiones de médicos cubanos:
Sometimiento obligatorio. Si bien la participación en las misiones de internacionalización es oficialmente voluntaria, “muchos médicos se sienten presionados para acogerse a dichas misiones y temen represalias por parte de Gobierno de Cuba si no participan”, revela el informe de ONU.
Los beneficios. “En muchos de los países que se benefician de una misión de internacionalización los médicos cubanos no recibirían un contrato de trabajo o si los tuvieran no siempre recibirían una copia del mismo”, dice el relevamiento. Así, se sostiene que el Gobierno de Cuba recibiría una suma de dinero de los gobiernos anfitriones y pagaría a los trabajadores una parte de dichos fondos.
Sin embargo, el Gobierno de Cuba, tal como lo destacan las relatoras de Naciones Unidas “retendría un porcentaje significativo del salario que los países anfitriones pagan por los profesionales cubanos que hacen parte de una misión de internacionalización”.
Fuente: Infobae