Más de 3.000 personas se congregaron en la Calle de Ferraz de Madrid. Se trata del tercer día consecutivo en el que se registran concentraciones en la emblemática vía capitalina.
El Político
La reunión de este lunes culminó, sin embargo, en incidentes violentos. Lo que era una movilización pacífica derivó en disturbios cuando los asistentes quisieron saltarse el cordón policial.
Los agentes resguardaban el edificio que alberga las oficinas principales del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), la tolda política a la que pertenece Pedro Sánchez, presidente en funciones del Gobierno de España.
Hasta allí han acudido los ciudadanos que no avalan la posible amnistía que negocian los socialistas. El perdón le sería concedido a Carles Puigdemont y a otros líderes catalanes que formaron parte del referendo secesionista de 2017.
Aquella consulta, que rompió el hilo constitucional en España, pretendía conseguir la independencia de Cataluña y, por consiguiente, su separación del resto de la geografía española.
Sus impulsores terminaron acusados por sedición. Algunos, como el propio Puigdemont, optaron por el ostracismo y terminaron en Bélgica, una nación que ha servido de refugio a diversos dirigentes soberanistas.
Tras seis años de auto exilio, el ex presidente de la Generalitat podría regresar a territorio español. Lo haría sin cuentas pendientes, gracias a la ley de amnistía que ha propuesto Pedro Sánchez.
??? | Las sedes del partido socialista PSOE en varias ciudades de España registraron este lunes protestas en contra de una posible amnistía a independentistas catalanes a cambio de su apoyo para la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. pic.twitter.com/XnWyuRuU1O
— EL POLÍTICO (@Elpoliticonews) November 7, 2023
El texto, que aún no es una realidad, funcionaría como moneda de cambio. Junts, el partido catalán liderado por Puigdemont, ha prometido apoyar a Sánchez si éste perdona al dirigente.
El presidente en funciones, quien busca permanecer en el cargo, intentará formar Gobierno. Para ello requiere, sin embargo, de una coalición que le garantice los apoyos necesarios.
Entre las toldas estarían los izquierdistas de Sumar, los ultranacionalistas del PNV y, por supuesto, Junts, en caso de que se concreten las negociaciones sobre la posible amnistía.
Más allá de los destrozos, los disturbios de este lunes no arrojaron lesionados. Que la cifra de heridos se mantuviera en cero parecía improbable cuando iniciaron los choques entre manifestantes y policías.
Los oficiales emplearon gas lacrimógeno para dispersar a la muchedumbre. En algunos casos también recurrieron al empleo de balas de goma. Esa acción ha sido condenada por representantes de VOX.
Desde el partido de derecha acusaron al Ejecutivo en funciones de “criminalizar a los españoles que protestan contra la amnistía y contra el golpe”. “Seguiremos en la calle”, advirtió Santiago Abascal, secretario general de la tolda.
Pedro Sánchez, por su parte, calificó a los manifestantes como “reaccionarios”. El gobernante en funciones señaló que, a su juicio, “atacar las sedes del PSOE es atacar a la democracia”.