La canciller alemana, Angela Merkel, apunta en una entrevista avanzada este jueves que en las elecciones generales de 2017 aspira a recuperar los votos de algunos electores que apostaron por los populistas de derechas de Alternativa para Alemania (AfD).
En unas declaraciones a los medios del grupo Funke que se difundirán íntegramente mañana, la jefa del Gobierno alemán se ve capaz de atraer a votantes que en alguna ocasión se hayan decantado por AfD, un partido que en las elecciones de Mecklemburgo-Antepomerania del pasado domingo obtuvieron más del 20 % de los votos.
"La Unión (cristianodemócrata, CDU) claro que quiere atraerse a muchos abstencionistas y, además, convencer a los ciudadanos que una vez han votado a AfD que pueden depositar en nosotros su confianza", aseguró Merkel, canciller de Alemania desde 2005.
A su juicio, "esto es posible" si el Gobierno es capaz de solucionar las cuestiones "que realmente mueven a las personas", algo que ve factible en el año que queda para las próximas elecciones generales, previstas para el otoño de 2017.
"Cuando miro todo lo que hemos logrado en el último año soy muy optimista", asegura Merkel en relación a la gestión de su Ejecutivo de la crisis de los refugiados.
No obstante, Merkel descartó explícitamente cambiar de rumbo en su política con los peticionarios de asilo o girar hacia la derecha para cerrar el paso a AfD: "La CDU es y sigue siendo el gran partido del centro en Alemania".
Ahora, lo más importante es trabajar "en la integración de los refugiados, en la devolución de aquellos que no tienen derecho a quedarse y en la seguridad interna", explicó la canciller, perfilando las prioridades de su Gobierno para los próximos meses.
Según los últimos sondeos, AfD tiene un apoyo de entre el 12 y el 14 % a nivel federal, colocándose como tercer partido con más apoyos en Alemania tras la CDU y los socialdemócratas, rascando cuota entre los abstencionistas, los conservadores e incluso votantes de La Izquierda.
Con información de EFE