La mayor preocupación de los votantes hispanos en Estados Unidos es el terrorismo y la seguridad nacional, según una encuesta presentada hoy en Cleveland por la organización de empresarios hispanos Latino Coalition.
Según la encuesta, presentada durante la Convención Republicana, la seguridad nacional constituye la primera preocupación de los votantes latinos conservadores y moderados, mientras que la segunda es que "se trate a la comunidad hispana con respeto".
El sondeo también indica que los latinos más conservadores dan una mayor importancia a una solución migratoria que los moderados.
En un almuerzo posterior a la presentación del documento, el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, aseguró que los votantes hispanos tienen las mismas prioridades que el resto de electores en Estados Unidos, con el terrorismo como una de las principales.
"Lo que la experiencia me ha enseñado es que los latinos tienen el mismo interés por la economía que los constituyentes asiáticos, las mismas aspiraciones que los afroamericanos o el mismo interés por la prosperidad de su familia que los blancos", aseveró Christie en un almuerzo organizado por Latino Coalition.
En el encuentro, celebrado de manera paralela a la Convención Republicana, Christie confió en que los latinos "evaluarán" y "juzgarán" a los candidatos presidenciales de noviembre y descubrirán que el republicano Donald Trump es la opción de la "libertad" frente a la demócrata Hillary Clinton.
Christie, que ayer dio un discurso en la convención en el que pidió "encerrar" a Clinton en una prisión, remarcó que una de la prioridades en esta elección es la seguridad, así como la mejora económica, la educación o una mayor seguridad en las calles.
Trump, a quien Christie ha apoyado desde marzo, ha dicho que los inmigrantes indocumentados traen crimen y que se debe construir un muro en la frontera con México, algo que podría llevar a una parte importante del electorado latino a alejarse aún más de los republicanos.
Christie recordó que en una reciente visita a México, donde se reunión con el presidente Enrique Peña Nieto, aprendió que los estadounidenses "vivimos en un buen vecindario" y que los mexicanos comparten valores a pesar de los desacuerdos.
EFE