Según algunos estudios actuales de las sociedades occidentales: hay más solteros que nunca. Parece que uno de cada cuatro adultos mayores de 50 años nunca se ha casado. En la ciudad de Nueva York, por ejemplo, uno de cada dos adultos vive solo.
María del Carmen Taborcía / El Político
El fenómeno es bastante novedoso y existen numerosas hipótesis para comprender los motivos por los cuales las personas no desean uniones permanentes o el matrimonio como forma de vida.
Al mismo tiempo, el malestar emocional y sentimental, los casos de depresión y los trastornos de todo tipo muestran un crecimiento alarmante en el mundo. Para aquellos que no responsabilizan de todo a los genes, lo que ocurre está estrechamente asociado con vínculos afectivos endebles o disfuncionales.
Muchos solteros viven bien y felices, esta soltería no implica soledad ni aislamiento. Se corresponde con personas que han elegido conscientemente no vivir en pareja, y tienen otros intereses que les llenan su existencia. Por ejemplo, el trabajo.
Adoran sus actividades laborales y no quieren enfrentarse al dilema de dedicarle menos tiempo para poder responder coherentemente a las expectativas de una familia. Pero suelen tener pareja y una buena red de amistades y familiares.
Solteros …¿Solitarios?
Los solitarios, en cambio, no tienen muy claro por qué no tienen una pareja estable con la cual convivir. Una respuesta frecuente es que no han encontrado a la persona adecuada.
Sin embargo, tampoco se sienten cómodos del todo viviendo solos. Suelen llevar vidas rutinarias. Es habitual que en ellos predominen sentimientos de apatía o tristeza.
También se encuentran los solitarios que van de una relación a otra, viven el “aquí y ahora”, como en una adolescencia eterna.
Algunos sociólogos apuntan hacia la existencia de un entorno que promueve el egocentrismo. La preocupación central del individuo es su propio yo, por lo que en ese esquema no hay lugar para nadie más, ni para estar atento a los sentimientos y necesidades de otra persona.
Hay quienes plantean la idea de la llamada “paradoja de la elección”, consistente en que antes era limitado el número potencial de personas que era posible conocer. La Internet ha dado la posibilidad de que los vínculos sean virtualmente infinitos, y el excesivo número de opciones paraliza la capacidad de decidir.
Cinco tipos de solteros
Una investigación sobre la soltería ha revelado que existen cinco categorías básicas por las que una persona no está en pareja:
- Poseer malas habilidades para generar un vínculo,
- Ausencia de interés,
- Falta de esfuerzo,
- Baja confianza en uno mismo,
- Y la creencia de ser poco atractiva como para llamar la atención de la otra persona.
Las aplicaciones (apps) para encontrar pareja han experimentado un impresionante auge en los últimos años. Son una herramienta de uso diario. Cada hora se crean alrededor de 4.000 perfiles en ellas.
Sin embargo, el resultado suele ser de relaciones inmediatas, más cortas, con la capacidad de desaparecer sin forjar o destruir los lazos.
Numerosas son las explicaciones y las motivaciones por las que los individuos humanos están solteros. Los modelos de familia han cambiado, y el romanticismo que otrora dominaba las fantasías para encontrar la media naranja también.
La soltería, afortunadamente, ya no es considerada como un estigma. Ahora la idea de vivir feliz adquiere matices tan diversos como personas en el mundo hay.
A tener en cuento lo que dijo la escritora de origen somalí Warsan Shire:
"Me siento tan bien a solas que sólo estaré contigo si eres más dulce que mi soledad”.
Abogada y Escritora