A partir del lunes, los puentes internacionales Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander conectarán nuevo el comercio legal entre Colombia y Venezuela ante la gran expectativa de sus pobladores que por siete años han aguardado la reapertura.
El Político
Vale destacar que el paso de dos camiones atravesando las fronteras entre Colombia y Venezuela fue el acto simbólico que selló la reapertura del comercio entre los dos países.
Se trata de un hecho que marca una nueva era en las relaciones bilaterales de estos dos países que comparten más de 2.300 kilómetros de frontera, informó LaTimes.
Lo cierto es que el presidente de Colombia, Gustavo Petro y el dictador venezolano, Nicolás Maduro, sellaron una nueva era en la relación colombo-venezolana después de siete años de paso cerrado para el transporte bilateral.
"Hoy es un día histórico para la región, para el país, para América del Sur, para América en general", dijo emocionado Gustavo Petro, quien estuvo presente junto a funcionarios de ambos gobiernos en la frontera que une a Norte de Santander con el estado Táchira en Venezuela, reportó CNNEspanol.
La gran movilización de hoy está en la frontera con Ven. Donde recuperaremos el comercio, socavado por un pensamiento obtuso, que generó crisis económica sin dimensiones. No más barreras entre pueblos hermanos. Que el único “Cerco Diplomático” sea la integración de Latinoamérica pic.twitter.com/uFrWwPEw6q
— Santiago Osorio M. (@osoriosantiago) September 26, 2022
Con la inminente reapertura, los vehículos empezaron a recorrer Colombia para llegar a la frontera cargados de productos como cartón corrugado, confitería, papel higiénico y vasos plásticos, que hace unos años se importaban de Venezuela y ahora se exportarán, según Guzmán Lizarazo.
La extensa región fronteriza de 2.200 kilómetros entre Colombia y Venezuela está conectada por puentes binacionales, algunos alzados sobre el río Táchira.
Lo que solía ser una frontera común que unía vínculos familiares y económicos cambió radicalmente en agosto de 2015, cuando Maduro ordenó su cierre luego de un ataque que dejó heridos a tres militares cuando cumplían un operativo contra el contrabando en San Antonio del Táchira, del lado venezolano.
La reapertura de la frontera entre Colombia y Venezuela es indudablemente un hecho histórico, que marca el comienzo de una etapa de relaciones de hermandad, respeto y Paz. Somos pueblos unidos por el lazo inquebrantable del Bolivarianismo. pic.twitter.com/eRkR4IgdXd
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) September 26, 2022
Lo cierto es que el cuestionado dictador venezolano, que no estuvo en el evento en la frontera, agradeció a Petro "por este paso inmenso que hemos dado para restituir las relaciones de hermandad, de unión, de cooperación, de complementaridad entre nuestros pueblos, que es lo más importante".
Cumplimos. Que la apertura de la frontera sea anuncio de prosperidad para Colombia, Venezuela y toda América. pic.twitter.com/lv1uEr31h7
— Gustavo Petro (@petrogustavo) September 26, 2022
Este lunes, una nueva etapa se empezó a tejer entre promesas de prosperidad y de vuelta a la normalidad de relaciones bilaterales que cuentan con años de historia para dos países vecinos, sin embargo, aún hay algunos retos que es necesario abordar como temas de comercio, transporte y seguridad en la frontera.
Algunos amenazaban y hablaban de “los días contados”, nosotros preferimos contar las tractomulas que van a mejorar nuestras economías campesinas. La reapertura de la frontera con Venezuela le devuelve la esperanza a millones.
La paz por delante ? pic.twitter.com/0sVOhqnHIW
— César Pachón (@CesarPachonAgro) September 26, 2022
Esto es lo que viene en la reconstrucción de las relaciones de los dos países.
El comercio y el transporte, una reapertura progresiva
Si bien este lunes se reabrió el transporte, aún falta mucho para que el tránsito sea completamente libre como en el pasado.
Los dos países no habían dejado de intercambiar bienes, sin embargo este solo se daba desde Paraguachón en la Guajira hacia el estado Zulia, en el extremo norte de la frontera.
Ahora se espera que con el cambio de la ruta Cartagena-Maicao-Guarero-Ureña, que antes tenían que hacer los transportadores, ahora directamente desde Cartagena-Cúcuta y de allí a Venezuela, se reduzca no solo el tiempo de tránsito, sino también el costo de los fletes de transporte.
Por el estado Táchira, donde está San Antonio, estaba permitido el paso peatonal desde mediados del pasado año. Ahora se abrirá el paso de camiones de carga, pero de manera progresiva.
El paso peatonal solo estará permitido desde las 6:00 a.m. hasta las 7:00 p.m. con la presentación del carné fronterizo, una identificación para quienes cruzan frecuentemente entre los dos países.
El paso de vehículos de carga en las fronteras está habilitado entre las 10 am y las 6 p.m. en los puentes Simón Bolívar y Ureña, con un límite de carga de 30 toneladas, debido al estado de los puentes, que siguen en revisión.
Se espera en pocas semanas se abra el otro puente internacional, el de Tienditas, también en Norte de Santander, que fue entregado en 2015, pero nunca ha sido utilizado.
El ministro de Transporte de Colombia, Guillermo Reyes, dijo que se trabaja en detalles y protocolos "que garanticen el tránsito eficiente, progresivo y seguro tanto de las personas como de los transportadores de carga" en todas las fronteras.
Siguen pendientes temas como la reactivación del sistema de transporte público de pasajeros entre ambos países y el intercambio y cruce de vehículos particulares entre las ciudades fronterizas, según dijo anteriormente Víctor Bautista, secretario de frontera de la gobernación del departamento de Norte de Santander, citado por Reuters.
Los vuelos aún están a la espera de reactivarse
La conexión aérea entre los dos países es también una materia pendiente. Si bien representantes de los gobiernos habían dicho que el 26 de septiembre un vuelo conectaría por primera vez en dos años Caracas con Bogotá —los vuelos fueron suspendidos desde el inicio de la pandemia de Covid-19—, lo cierto es que no hubo vuelo este lunes, según el Ministro de Transporte de Venezuela, Ramón Velásquez, debido a falta de permisos.
“En cuanto al transporte de cargas, estamos trabajando en el tema. Conviasa como línea aérea está lista esperando avanzar" en los permisos, dijo Velásquez desde Cúcucta, este lunes.
Anteriormente se tenía planeado que la aerolínea estatal Conviasa cubriera el primer vuelo entre Caracas y Bogotá, pero debido a las sanciones de Estados Unidos a la aerolínea venezolana, la ruta prevista para el lunes entre Caracas y Bogotá fue suspendida y no se ha informado hasta ahora de cuándo podría abrirse, informó Reuters.
Se esperaba que desde Colombia iniciaran los vuelos comerciales que conecten Bogotá-Caracas el 4 de octubre, sin embargo, las ventas de los pasajes a través de Wingo, que es la única aerolínea que hasta el momento tiene autorización, están suspendidas.
Wingo le dijo a CNN en un comunicado que la suspensión en la venta de pasajes aéreos se dio por solicitud del gobierno de Venezuela.
"El Gobierno de Venezuela le ha solicitado a Wingo suspender el inicio de sus operaciones aéreas, las cuales estaban inicialmente programadas y autorizadas para el 4 de octubre", dice el comunicado. "Según se nos ha comunicado, esta suspensión temporal es en espera por resolver asuntos entre los Gobiernos de Colombia y Venezuela sobre las aerolíneas aprobadas para realizar los vuelos entre los dos países", agregó.
La aerolínea dijo que está "a la espera de las decisiones finales que adopten las autoridades" para el reinicio de venta de boletos e informará en su momento cuando se reinicie la venta de pasajes aéreos.
Pasos fluviales
En cuanto a la conectividad marítima y fluvial el Ministerio de Transportes de Colombia informó la semana pasada que "no habrá restricción a la navegación fluvial y, por el contrario, se fortalecerá la conexión marítima entre los puertos colombianos y venezolanos", con el fin de "elevar a un nivel superior" las relaciones binacionales entre los dos países.
La reactivación del comercio
En el acto protocolario de este lunes, los camiones de carga que cruzaron las fronteras iban cargados, por una parte, con cilindros de acero desde Venezuela a Colombia y el otro, el primer camión que se trasladó de Colombia a Venezuela, transportaba insumos médicos.
Cuatro de los camiones de la empresa Transporte el Cóndor, también estaban preparados para mover papel higiénico, vasos de plástico y textiles valorados en unos 80.000 dólares, dijo el gerente Diego Bohórquez, reportó Reuters.
Si bien los países nunca han dejado de comercializar bienes durante los años de crisis, el comercio disminuyó drásticamente en los últimos años.
El ministro de Industria y Comercio de Colombia, Germán Umaña, proyectó que con la reapertura de la frontera y la reactivación del comercio por esta vía, se estiman ingresos entre los US$1.000 y US$1.200 millones y al término de los 4 años de Gobierno podría alcanzar aproximadamente los US$4.500 millones, una cifra que aún está lejos de alcanzar récords como el de 2008, el "mejor año para el comercio bilateral", según las autoridades de Colombia, cuando se alcanzó una cifra de US$ 7.000 millones anuales en comercio.
En lo que va corrido de 2022, Colombia ha exportado a Venezuela artículos como confitería, polipropileno, abonos minerales, aceite de palma, margarina, aceite de soya, compresas y tampones, insecticidas y acumuladores eléctricos.
Desde Venezuela han llegado a Colombia productos químicos, sal, azufre, máquinas y material eléctrico, aluminio y sus manufacturas, pescados y plásticos, entre otros, según el Ministerio de Industria y Comercio.
La seguridad fronteriza, un tema crítico
Uno de los mayores desafíos de esta reactivación es la seguridad en la porosa frontera de los dos países, pues a falta de presencia estatal, grupos armados han proliferado a lo largo de los departamentos de Norte de Santander y Arauca, y de allí hacia el lado venezolano, dice un reporte de la Fundación Paz y Reconciliación, publicado el 31 de agosto de este año.
Grupos armados como las "disidencias de las FARC, el Clan del Golfo y otros grupos más pequeños como el Cartel de Sinaloa, La Frontera, La Línea, el EPL y El Tren de Aragua", según Pares, tienen esta región en jaque.
Allí se han reportado cientos de asesinatos y masacres, secuestros, confinamientos obligatorios por violencia, enfrentamientos entre grupos armados ilegales, e incluso entre el ELN y el Ejército de Colombia; también amenazas contra líderes sociales y ni hablar de las disputas de bandas criminales por controlar territorios para el narcotráfico.
Solo en la zona del Catatumbo, en Norte de Santander, cerca a Venezuela, confluyen una serie de grupos armados que luchan por controlar el negocio de los cultivos ilícitos en la frontera común.
En esta región confluyen una serie de economías ilegales como "impuestos a la gasolina, a la cerveza, a los insumos químicos, al contrabando o a la producción de pasta base de coca", según PARES, y estas fuentes de ingreso han perpetuado la guerra.
Al respecto, el presidente Petro habló de recuperar la región con seguridad y aseguró que espera que con la reapertura de las fronteras quienes se beneficien sean los habitantes de la región para evitar riesgos de seguridad.
“Yo deseo que las primeras personas beneficiarias sean las que habitan a lado y lado de la frontera; las que se arriesgaban en esas trochas, las mujeres que caminaban por allí prácticamente (a merced) de funcionarios que incluso llegaban a cobrar peaje, y de bandas de todo tipo, multicrimen, que podían matar, que podían violar”, dijo Petro.
Entre tanto Maduro también habló sobre un plan de seguridad coordinando para la frontera:
"Ya se están dando las coordinaciones para la seguridad, los planes de seguridad conjuntos entre Colombia y Venezuela para el combate a las bandas criminales fronterizas, que le hacen la vida pesada al pueblo de la frontera, con el secuestro, el contrabando, la violencia”.
Así lo dijo Maduro la semana pasada antes del acto protocolario de este lunes con el que inició un nuevo capítulo en las relaciones de países vecinos.