El presidente venezolano, Nicolás Maduro, dijo que Estados Unidos le está aplicando a su país un “bloqueo financiero” tras informar que el estadounidense Citibank envió hoy una comunicación anunciando que en 30 días cerrará la cuenta al Banco Central de Venezuela (BCV) y al Banco de Venezuela.
“Hoy recibimos la comunicación del Citibank, banco estadounidense, con el cual pagamos en 24 horas todas las cuentas que necesita pagar el país para las transacciones en Estados Unidos y en el mundo, y el Citibank, sin aviso (…) dice que en 30 días le va a cerrar la cuenta al BCV y al Banco de Venezuela”, dijo Maduro.
El presidente dio la información desde un consejo de ministros que fue transmitido en cadena obligatoria de radio y televisión desde el que aseguró: “Bloqueo financiero se llama esto”.
La información acerca del Citibank fue ofrecida por el gobernante después de comentar lo sucedido con la empresa estadounidense Kimberly Clark en Venezuela que anunció el pasado sábado la suspensión de sus operaciones en el país caribeño lo que llevó hoy a la ocupación de la compañía por parte del Gobierno.
Agregó que gracias a una llamada de los trabajadores de esta empresa a instituciones estatales hoy se levantaron actas fiscales “y la empresa Kimberly está en manos de los trabajadores, produciendo, trabajando y vamos a invertir todos los recursos que hagan falta para que se consolide”.
Dijo que “todo esto” forma parte de la “obsesión de la nueva inquisición obamista”.
Señaló, en este sentido que el presidente de Estados Unidos, Barak Obama supuestamente tiene una “obsesión” con Venezuela y que a donde viaja la lleva.
“¿Qué le hemos hecho nosotros a los Estados Unidos sino defender el derecho a nuestra dignidad”, se preguntó.
Las relaciones entre EEUU y Venezuela han sido conflictivas desde la llegada al poder en 1999 del ya fallecido presidente Hugo Chávez, mentor y antecesor de Maduro, y desde 2010 las delegaciones de EEUU en Caracas y de Venezuela en Washington no cuentan con embajadores.
A mediados de junio pasado el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, se reunió con la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, y acordaron reanudar el diálogo bilateral.
Y en medio de esos intentos por el diálogo el Congreso estadounidense aprobó el jueves pasado extender por tres años las sanciones a un grupo de funcionarios venezolanos que fueron impuestas en 2014 por su supuesta vinculación con violaciones a los derechos humanos o corrupción y que expiraban a finales de 2016.
Esta acción fue rechazada por Venezuela que consideró que se trata de sanciones “unilaterales, ilegales y violatorias del Derecho Internacional”.