Luiz Inácio Lula da Silva, exobrero sindicalista convertido en el presidente más popular de Brasil antes de ser encarcelado, vuelve al ruedo político para tratar de reconquistar el poder en octubre contra su archirrival, el ultraderechista Jair Bolsonaro.
El Político
Lula, líder del Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), inició este martes su campaña en una fábrica de automóviles al sureste de Sao Paulo (sureste de Brasil), "una vuelta a sus orígenes" obreros, según su equipo de prensa.
El expresidente (2003-2010) aspira a un tercer mandato presidencial con la promesa de repetir los logros sociales entre las clases más vulnerables. Durante su gestión, unos 30 millones de brasileños salieron de la pobreza, según datos oficiales.
Lula por un tercer mandato
En marzo de 2021 recuperó sus derechos políticos con la anulación de sus condenas judiciales, tras estar envuelto en la "Lava Jato", la mayor operación anticorrupción de la historia del país, enfocada en una gigantesca red de sobornos en torno a la petrolera paraestatal Petrobras.
El juez anticorrupción Sergio Moro lo había condenado en 2017 a nueve años y medio de prisión por la obtención de un apartamento tríplex en primera línea de playa de una constructora a cambio de contratos públicos.
Fue encarcelado en abril de 2018 por corrupción y lavado de dinero, tras un mediático atrincheramiento en el Sindicato de Metalúrgicos en Sao Bernardo do Campo, en el cinturón industrial de Sao Paulo.
Pero no por ello perdió influencia en el PT ni en la política brasileña, si bien el escándalo hizo que se convirtiera en un líder repudiado por buena parte de la población.
"Milagro" económico
En 2003 se convirtió en el primer jefe de Estado brasileño salido de la clase obrera, después de tres tentativas electorales frustradas, y se granjeó un enorme prestigio internacional como piloto del "milagro" económico brasileño, empujado por el viento a favor de los altos precios de las materias primas.
Logró la reelección después de haber superado el escándalo del "Mensalao", una millonaria contabilidad ilegal montada por el PT -partido que cofundó en 1980- para comprar el apoyo de congresistas.
"Luchamos la mayor de todas las batallas contra el hambre y vencimos. Hoy sé que preciso cumplir nuevamente esa misión", declaró al oficializar su candidatura para 2022.
Lula coronó su doble mandato consiguiendo la sede del Mundial de fútbol de 2014 y los Juegos de Rio-2016.
Bolsonaro también comenzó campaña
Brasil entró en una campaña electoral de alto voltaje, con el ultraderechista Jair Bolsonaro y el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva como protagonistas de la disputa presidencial más polarizada en décadas, reportó LaOpinión.
El presidente Bolsonaro, de 67 años, encabezó un mitin en la misma esquina en la que fue apuñalado en la campaña de 2018, en Juiz de Fora, en el estado de Minas Gerais (sudeste). “La ciudad donde renací”, dijo en un discurso cargado de declaraciones patrióticas y alusiones a Dios y a la Biblia.
Con una chaqueta negra abrochada hasta el cuello, Bolsonaro reiteró su promesa de luchar contra la inflación de dos dígitos, el aborto, las drogas y defender la “propiedad privada”, blandiendo la amenaza “comunista” en Brasil si pierde los comicios en octubre.
“¡Mito, mito, mito!”, le corearon centenares de seguidores. Su esposa, Michelle Bolsonaro, suscitó igual o incluso más entusiasmo.