Si bien los números del voto anticipado están alcanzando niveles récord, todavía hay millones de boletas por correo que aún no se han devuelto.
El Político
Más de 90 millones de personas ya votaron en las elecciones presidenciales en Estados Unidos. Esto equivale al 65% del total de boletas presentadas en los comicios de 2016.
La mayoría de los expertos electorales cree que en estos comicios participarán entre 150 y 160 millones de personas, lo que supondría que se ha superado el ecuador de la votación.
Arizona, Florida, Georgia, Hawái, Montana, Nevada, Nuevo México, Carolina del Norte, Oregón, Tennessee y el estado de Washington informaron que al menos el 80% del total de votos de 2016 en esos estados se ha entregado, reportó Infobae.
Nuevos votantes
La gran pregunta sobre participación en todos los comicios es: ¿qué partido está convenciendo a los nuevos votantes? Los datos muestran que los demócratas estarían ganando en ese campo, pero no necesariamente de una forma tan dramática como podrían sugerir algunos de los grandes datos globales.
En más de 1 de cada 4 boletas presentadas por el momento, el 27%, eran de votantes nuevos o infrecuentes, personas que o bien nunca han votado antes o que lo han hecho menos de la mitad de las veces que pudieron participar.
Parece una gran cifra, pero no es mucho más alta que en los últimos años. La firma de datos demócrata Catalist halló que en 2016 aproximadamente un cuarto del electorado no había votado en las anteriores presidenciales.
Sin embargo, podría seguir subiendo ya que los novatos y los no habituales tienden a votar más cerca de la jornada electoral o el propio día.
E incluso los pequeños cambios pueden marcar la diferencia en los estados donde la batalla entre Trump y el aspirante demócrata, Joe Biden, está más ajustada.
Los votantes se congregan en la región conocida como Cinturón del Sol, especialmente en estados como Florida, Carolina del Norte y sobre todo en Texas, que los demócratas esperan ganar movilizando a una gran parte del electorado que se abstiene en la mayoría de las elecciones.
“Los demócratas ya están expendiendo su electorado”, dijo Tom Bonier, de la firma de datos demócrata TargetSmart. “Esto parecería favorable a Biden, pero hay que tener en cuenta la advertencia que hemos escuchado un millón de veces antes: no sabemos cuánta gente votará el día de las elecciones”.
Voto afroamericano
El destino de Biden podría estar ligado a una fuerte participación de los votantes afroamericanos en los estados en disputa.
Por el momento, alrededor del 9% de las boletas anticipadas son de afroestadounidenses, casi a la par con el 10% de 2016, de acuerdo con una estimación de votantes realizada por Pew Research entonces.
Los votantes afroamericanos están manteniendo su cuota en varias zonas en disputa. En Carolina del Norte suponen el 21% tanto en voto anticipado como en registros, mientras que en Georgia constituyen el 30% voto adelantado y el 32% de los electores registrados.
Un ligero descenso en la elevada participación de los afroestadounidenses en 2008 y 2012 repercutió en la derrota de los demócratas cuatro años más tarde, y la formación y sus seguidores están observando atentamente qué ocurre en esta ocasión.
Datos ambiguos
Ha subido el número de afroestadounidenses mayores que han votado. Los de 65 años o más son ya una de los grupos demográficos más fiables en lo comicios, pero según los datos de TargetSmart, han mejorado su participación en seis estados clave: Arizona, Florida, Georgia, Nevada, Carolina del Norte y Texas.
Al mismo tiempo, de acuerdo con el Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU, por sus siglas en inglés), los votantes afroamericanos más jóvenes, que son menos fiables, han depositado ya más votos que en 2016. Este es un indicio del aumento del compromiso de un sector del electorado que bajó en 2016.