El recién nombrado ministro de la defensa colombiano, Diego Molano, afronta uno de los retos más difíciles del gobierno de Iván Duque, asediado por la violencia que se evidencia en 254 excombatientes asesinados desde la firma del Acuerdo de Paz.
Rosana Ordoñez/ El Político
Tras el fallecimiento de Carlos Holmes Trujillo la semana pasada, el nuevo ministro de Defensa, Diego Molano afronta un complicado panorama.
El nuevo favorito
Molano en los últimos meses se había desempeñado como director del Departamento Administrativo de la Presidencia, en reemplazo de María Paula Correa, así entró al círculo de confianza del presidente Duque.
Audaz, apela a su don de la palabra para debatir en defensa del Presidente Duque, pero además exhibe una trayectoria exitosa, pero muy distinta a la de su predecir Carlos Holmes Trujillo, cuya larga carrera fue su principal aval.
"Trabajaremos sin descanso contra la delincuencia y por la defensa y seguridad de los colombianos. En reunión con la cúpula de la Fuerza Pública entrego y recibo toda la confianza y apoyo para lograr las metas del Ministerio de Defensa", dijo Molano en la posesión de su nuevo cargo.
¿Quién es Diego Molano?
Diego Andrés Molano Aponte es administrador de empresas de la Universidad del Rosario, con especialización en Relaciones Internacionales, de la Universidad Javeriana, y maestría en administración pública de la Universidad de Columbia en Estados Unidos.
Se desempeñó como asesor de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, fue Alto Consejero Presidencial para la Acción Social y Cooperación Internacional, director del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, director Adjunto del programa Midas (Más Inversión para el Desarrollo Alternativo Sostenible) de Usaid, director de la Fundación Bavaria, precandidato a la Alcaldía de Bogotá por el Centro Democrático y concejal de Bogotá por el mismo partido.
Cargos muy distintos a tener que lidiar con narcotraficantes, delincuentes, guerrilleros, asesinos a sueldo, izquierdistas con ambiciones de poder y un país militarizado con un enemigo declarado como es Venezuela.
Que le critican
La decisión no cayó muy bien en varios sectores de la opinión pública y periodistas, políticos y honorables congresistas de la República expresaron su indignación y desacuerdo con el nuevo miembro del gabinete Duque.
Una de las razones por las que el primer mandatario del país y su nuevo ministro se ganaron varias críticas y cuestionamientos, fue porque durante el evento de posesión, Duque dijo que uno los logros de Molano y que lo hacía merecedor a desempeñarse como el jefe de ese ministerio, es ser hijo de militar y ser egresado de un colegio de las fuerzas armadas.
Combatir la violencia ¿Con más violencia?
En enero de 2021 fueron asesinados 21 líderes sociales y cinco excombatientes de las Farc, en todo el 2020 el país se enteró de 91 masacres, 310 líderes asesinados y también 64 exguerrilleros firmantes de Acuerdo de paz según la información de Indepaz.
Por el lado de los grupos armados al margen de la ley, el mismo gobierno ha señalado que entre 2018 y 2020 se duplicó el número de miembros que integran las disidencias y calcula que hay 4.600, de los cuales 2.600 están armados y el resto pertenecen a las redes de apoyo y milicias tanto rurales como urbanas.
Cultivos ilícitos y marihuana legal
Todo lo relacionado con la producción de estupefacientes y sobre todo con la comercialización entra ahora bajo la égida de Molano, un mundo muy distinto a los pasillos de la Universidad de Columbia.
El crecimiento de los cultivos ilícitos, el poder que siguen ostentando grupos como La Constru, el Clan del Golfo, los Caparros, o los asociados de varios de estos con grupos ilegales internacionales dedicados al negocio del narcotráfico en México (Jalisco nueva generación), Brasil y Venezuela.
Un ejército con debilidades
Colombia cuenta con un gran ejército,capacitado, entrenado y con equipos, pero no ha escapado de los escàándalos por abuso de autoridad.
En el Ejército se han destapado casos como el de los soldados que violaron a una menor indígena, o en la Policía, donde conocimos de la muerte de un abogado mientras estaba en custodia de los uniformados en un CAI o el mismo uso excesivo de la fuerza en pasado 9 de septiembre durante las protestas en Bogotá.
En mayo del 2019, el diario estadounidense New York Times publicó un extenso reportaje sobre el Ejército colombiano. Allí se reveló cómo algunos altos mandos estarían exigiendo a los 50 principales generales y coroneles del país “doblar los resultados”, lo que llevó, a la hora de la ejecución, “a identificar asesinatos sospechosos o arrestos”.
Entonces volvimos a recordar un capítulo lamentable en la historia reciente de Colombia: los falsos positivos.
El Gobierno del presidente Duque, molesto con la publicación, envió una carta por medio del canciller y el ministro de Defensa del momento, Guillermo Botero, en donde calificaban la investigación como ‘tendenciosa, distorsionada y parcializada de los esfuerzos del estado colombiano y sus fuerzas armadas por estabilizar la situación en el territorio colombiano para garantizar orden y seguridad”.
La Paz esquiva
El artículo también indica de manera inequívoca —en la voz del autor— que Colombia enfrenta un momento difícil en el que la paz ha sido difícil de consolidar, a pesar del acuerdo de paz de 2016, lo que ejerce una enorme presión sobre el país.
Uribe o Santos
Mientras los creadores de noticias falsas se apresuraron a decir que el expresidente Alvaro Uribe sería el sustituto de Holmes Trujillo, el ex presidente Juan Manuel Santos reiteró la necesidad de un cambio de estrategias en el campo militar:
Mientras Santos ocupó la cartera de Defensa la Fuerza Pública colombiana ejecutó los operativos militares más certeros contra las FARC-EP hasta su momento.
La muerte de alias el "Negro Acacio", alias "Martín Caballero", alias Raúl Reyes en la Operación Fénix, la desmovilización de alias "Karina" y la liberación de la excandidata presidencial Íngrid Betancourt, tres estadounidenses y once militares y policías secuestrados en la llamada Operación Jaque fueron algunos de sus logros.
Cuidado con los falsos positivos
Santos ejercía como ministro de Defensa cuando se descubrieron los llamados "Falsos Positivos" durante el gobierno del presidente Álvaro Uribe Vélez. Dentro de las diferentes irregularidades encontradas por una comisión ad hoc de evaluación reveladas por la revista Semana se encontraron:
La utilización indebida por parte de militares y civiles de la Directiva firmada por el anterior Ministro de Defensa Camilo Ospina Bernal, en la que se establece un régimen de incentivos económicos (Recompensas) por la información o entrega de miembros de grupos armados ilegales o material de intendencia.
Hay reportes sobre las distintas irregularidades cometidas por miembros de la Fuerza Pública en los departamentos de Antioquia, Meta, Córdoba, Norte de Santander y Casanare al notificar supuestas bajas para lograr recompensas.
Santos admitió públicamente la existencia de Ejecuciones Extrajudiciales en Colombia por parte de las Fuerzas Armadas bajo su mando.
Ese mismo día, después de que 27 oficiales del Ejército fueron retirados discrecionalmente del servicio activo, el General Mario Montoya, quien ejercía como Comandante del Ejército de Colombia, renunció a su cargo.
Será un Ministro muy acompañado
Pese a los grandes retos, Diego Molano no estará solo. Aunque deberá ganar la confianza y el respeto de las Fuerzas Armadas, recibe el apoyo del Presidente Duque. También contará con el apoyo del almirante Faller, el jefe del Comando Sur y del Secretario de Estado de EEUU.
Fuente: Semana / El Espectador
