La violencia marcó cuatro meses de 2017 en Venezuela, durante los cuales perdieron la vida más de 130 personas y centenares de heridos a manos de los cuerpos de “seguridad” del Estado y paramilitares del régimen madurista, en una lucha de los venezolanos por recuperar la libertad y la democracia en su país.
El Político
Sin embargo, las personas que resultaron heridas durante las protestas actualmente sufren para curarse, puesto que la escasez de medicinas se incrementa a diario en el territorio.
Jorge y Delcy Rodríguez, herederos de un pasado violento y delicuente https://t.co/XWsbYnAqUA pic.twitter.com/cc2sXXO40L
— El Político (@elpoliticonews) August 24, 2017
Según reseñó la agencia de noticias Reuters, Jesús Ibarra, un estudiante de ingeniería de 19 años, sufrió la brutal represión de los funcionarios venezolanos cuando una bomba lacrimógena le “pulverizó” una parte del cráneo mientras protestaba.
El joven “apenas habla y camina” y debe ser operado por sexta vez para colocarle una pieza para cubrir una parte del cráneo que le falta. “Yo converso mucho con mi hijo y a veces me hace entender que no valió la pena, que se arrepintió y que fue un error. Pero otras veces me dice claramente que sí valió la pena porque estaba luchando por un cambio en el que él cree“, dijo José Ibarra, padre de Jesús.
Heridos durante protestas en #Venezuela sufren para curarse por escasez de medicinas https://t.co/qcz2PudSO9 │Por @umarcelino y @ina_aponte pic.twitter.com/5djmBHopYT
— Reuters Venezuela (@ReutersVzla) August 24, 2017
Brian Dalati es otro de los afectados. Con 22 años estudia cocina y cuando se dirigía a clases fue interceptado por efectivos se seguridad, quienes lo patearon y robaron.
“Yo simplemente me tapaba, esperaba que no me hicieran nada, a ver si salía con suerte. Pero, de repente, llegó uno de ellos y me disparó a quemarropa en los pies y me dejaron ahí tirado”, destacó al tiempo que recalcó que “no estaba haciendo nada, no había la necesidad (…) fue pura malicia”.
El padre de Dalati confesó que se le complica conseguir los insumos necesarios para curarle las heridas.