El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha conseguido un triunfo excepcional, cuando el Senado, con 80 votos a favor, y apenas 15 en contra, aprobó en solo dos días una Lex Express que evitará la huelga de ferrocarriles. La Cámara de Representantes ya había aprobado el proyecto de Ley.
El Político
La huelga de ferrocarriles arrancaría en apenas seis días.
Ante esto, y tomando en cuenta que la Constitución estadounidense permite al Congreso legislar para evitar una huelga, demócratas y republicanos se han puesto de acuerdo para evitar el colapso de un transporte esencial en las semanas previas a la Navidad.
La iniciativa de Biden
Debe reconocérsele al presidente norteamericano la claridad que tuvo al reunirse el martes con los líderes del Congreso en un esfuerzo por evitar la huelga que sería devastadora para la economía del país
Tanto a republicanos como a demócratas les planteó como medida más urgente aprobar esta norma para evitar la huelga.
Con ella, se impone con fuerza de ley un principio de acuerdo que el Gobierno de Biden promovió entre los representantes de los trabajadores y de las empresas en septiembre.
Sin embargo, el acuerdo fue rechazado por cuatro de los 12 sindicatos involucrados.
El acuerdo conlleva una subida salarial del 24% a lo largo de cinco años y otras medidas de flexibilidad que favorecen a los empleados.
Sin embargo deja fuera un punto clave reclamado por los trabajadores: hasta siete días anuales de baja por enfermedad pagada.
El senador demócrata por Vermont, Bernie Sanders, ha propuesto que se introdujese esa mejora en la ley, pero esa propuesta se ha votado de forma separada y ha sido rechazada por la oposición de los senadores republicanos.
Biden ya había pedido al lunes al Congreso que actuara.
“Permítanme ser claro, un cierre ferroviario devastaría nuestra economía. Sin el ferrocarril de mercancías, muchas industrias estadounidenses cerrarían”, dijo en un comunicado.
“Como presidente orgulloso de estar a favor de los trabajadores, soy reacio a anular los procedimientos de ratificación y las opiniones de quienes votaron en contra del acuerdo".
En este caso, en el que el impacto económico de un cierre perjudicaría a millones de trabajadores y familias, creo que el Congreso debe hacer uso de sus poderes para aprobar este acuerdo”, añadía.
Biden ha tratado de recuperar el voto trabajador al que en buena medida había seducido Donald Trump
Pero ahora ha preferido evitar el daño que la paralización de los ferrocarriles haría al país.
Hoy firmará la Ley de ferrocarriles
El plazo para cerrar un acuerdo vencía el próximo 9 de diciembre y la fecha se acercaba sin entendimiento entre las partes.
Como parte de la negociación para aprobar la ley, los republicanos han propuesto que ese plazo límite se extienda por 60 días más.
Biden ha expuesto también otras prioridades al llamado Congreso, el que sigue operando hasta que tomen posesión los elegidos el pasado 8 de noviembre.
El presidente quiere que se aprueben fondos adicionales para la ayuda militar y económica a Ucrania y la lucha contra la covid. La tramitación de esas posibles medidas, sin embargo, no avanza tan rápido.