La actual pandemia por el virus chino ha demostrado, de nuevo, las diferencias económicas y de salud que existen en el mundo. La brecha social es más amplia
Mario Beroes/El Político
Mientras Europa y algunos países de América, Asia y Oceanía han logrado detener el avance del virus, vacunar a sus habitantes y reforzar dichas vacunas, el resto de los países, apenas si pueden medio detener el avance del virus, y esto a costa de miles de muertos.
Latinoamérica, con algunas ínfimas excepciones como Chile, Uruguay, Ecuador y Costa Rica, no ha podido establecer un verdadero proceso de vacunación que garantize la salud a sus millones de habitantes.
El deterioro de la salud pública en la región llevó al colapso de la exigua salud privada, unido al mal manejo de la situación por los mandatarios regionales, quienes en su mayoría están inmersos en profundos hechos de corrupción. De ahí que dolorosamente no quede otra que decir: si tienes recursos te salvas, si no te mueres.
Millonarios más ricos gracias a la pandemia
La riqueza de los milmillonarios en Latinoamérica aumentó en un 52 % desde el inicio de la pandemia de coronavirus, mientras que los pobres han estado más expuestos a las muertes por el virus chino, según el informe "Las desigualdades matan", presentado este lunes por la organización humanitaria Oxfam.
El informe "Las desigualdades matan" se conoce en medio del avance desbordado de contagios por la variante ómicron, lo que supone que la población más necesitada empeora su situación, en tanto que los grandes capitales siguen creciendo.
Entre marzo de 2020 y noviembre de 2021, según el informe dado a conocer por la agencia EFE, la riqueza de los más acaudalados en América Latina y el Caribe aumentó en 97.000 millones de dólares, un 52 %.
Los bancos centrales han inyectado miles de millones de dólares en los mercados financieros para salvar la economía, pero una gran parte ha acabado en los bolsillos de los milmillonarios, que se han aprovechado del auge de los mercados bursátiles, señala el documento.
No es suficiente lo realizado
"Definitivamente la pandemia ha sido una oportunidad de bonanza para las personas más ricas de la región", aseguró a EFE la directora regional de programas para Oxfam en América Latina y el Caribe, Gloria García, citada en un artículo de la revista Swissinfo.
En contraposición, el resto de la población ha visto, sin poder hacer nada, disminuir drásticamente sus ingresos, especialmente porque han perdido sus trabajos.
Pese a que Oxfam reconoce los esfuerzos de los gobiernos para apoyar con ayudas económicas a las personas, considera que "no han tomado las medidas suficientes para proteger a su población, para poderles proveer la protección social que se hubiera requerido durante este tiempo".
Sistemas de protección débiles
América Latina es la región más afectada por la pandemia porque pese a que tiene el 8,4 % de la población mundial, ha "puesto el 30 % de los muertos, es decir, tenemos un millón y medio de personas que han fallecido y eso significa el 30 % de las muertes globales", dijo García.
Esto significa que los sistemas de protección de América Latina "son más débiles que los de la mayoría o los del resto del mundo", expresó la funcionaria.
Las cifras también dejan ver que en los países latinoamericanos muere casi el doble de personas que en las naciones ricas, precisamente porque los sistemas de salud no brindan atención a los enfermos y, porque las "vacunas han llegado más tarde con una distribución que no siempre ha sido equitativa".
García indicó además que las más golpeadas por la covid-19 son las mujeres y que la paridad con los hombres se va a demorar más porque en América Latina ellas han perdido sus trabajos y eso aleja esa posibilidad.
"Esta paridad se va a demorar unos 135 años todavía, es decir, se retrasó ese camino en el que íbamos y que no era nada halagüeño, pero eso nos ha empeorado bastante los tiempos para superar la desigualdad."
Recursos hay, falta decisión política
Según esta red global de organizaciones no gubernamentales, la actual situación derivada de la pandemia no se debe enfocar tanto a que hace falta dinero, pues los recursos los hay.
"Lo que falta es decisión política, pues en los momentos más críticos los gobiernos consiguen fondos para salir de las situaciones más precarias.
"Esas medidas deben ser más sustanciales, deben ser muchísimo más estructurales; deben mantenerse a largo plazo, independientemente de si eso les representa o no votos en el futuro."