Joe Biden, Emmanuel Macron, Olaf Scholz, Vladímir Putin y Xi Jinping son solo algunos de los líderes mundiales que han decidido no asistir a la COP29, celebrada del 11 al 22 de noviembre en Bakú, Azerbaiyán. Sin embargo, por primera vez, el régimen talibán de Afganistán estará presente en esta cumbre climática, gracias a la invitación del secretario general de la ONU, António Guterres.
Abdul Qahar Balkhi, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores afgano, confirmó que "una delegación del Gobierno afgano estará en Bakú", según declaraciones recogidas por AFP.
Aunque es la primera vez que los talibanes participan en la COP29, ya habían recibido invitaciones para asistir a cumbres climáticas anteriores, pero nunca lograron obtener los visados necesarios.
Antes de su llegada a Bakú, los talibanes expresaron su preocupación por el cambio climático, considerándolo "una cuestión humanitaria". Zainulabedine Abid, un alto funcionario del régimen talibán, hizo un llamado a la comunidad internacional para que no mezcle el cambio climático con cuestiones políticas.
Beneficios económicos para Afganistán
Durante la COP29 se abordará principalmente la redistribución de fondos destinados a ayudar a los países menos desarrollados a alcanzar sus objetivos climáticos. Afganistán es uno de esos países y podría beneficiarse económicamente si se acuerda una refinanciación.
Por ello, el régimen talibán ha solicitado apoyo a los líderes mundiales. Sher Mohammad Abbas Stanikzai, viceministro de Asuntos Exteriores, afirmó desde Bakú: "Pedimos a las Naciones Unidas y a las potencias ricas que nos ayuden a mejorar nuestro medio ambiente y servir a nuestro pueblo".
Hasta ahora, ningún país ha reconocido oficialmente al régimen talibán como el gobierno legítimo de Afganistán. Solo algunas naciones, como Rusia y China, lo consideran un gobierno provisional.