Si algo ha caracterizado al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela es buscar las mil y una jugadas para poder salirse con las suyas en situaciones donde se ven comprometidos.
El Político
Así ha intentado que suceda por ejemplo con el caso de uno de sus testaferros Alex Saab, quien desde hace meses está preso en Cabo Verde y aunque hoy su proceso de extradición a Estados Unidos luce cada vez más cerca, lo cierto es que Maduro y su gente ha hecho mil esfuerzos para evitar que esto ocurra.
Ahora, en otra jugada de las acostumbradas otro de sus testaferros, Raul Gorrín, dueño del sancionado Globovisión, le fue otorgado un sobreseimiento de su causa por algunas irregularidades que tienen que ver con un préstamo realizado por Petróleos de Venezuela (PDVSA) a dos empresas de maletín que están asociadas con él y sus secuaces.
El tribunal ordena “el cese de cualquier medida de carácter personal o real que pese sobre los referidos ciudadanos respecto a los hechos sobre los cuales recae la presente decisión”.
Tal decisión se refugia en que la operación “no evidenció lesión al patrimonio de PDVSA”.
Sin embargo, la juez estableció que Gorrín y otro asociado no intervinieron en dicha negociación.
Resalta una nota del portal Primer Informe que "En efecto, como se desprende de la investigación realizada por Cuentas Claras Digital en 2017, Gorrín no figura en los registros de la empresa Rantor Capital CA pero todos los indicios hallados señalan a Gorrín como beneficiario final. Ello queda confirmado en la segunda fase de la operación cuando Rantor Capital cede el contrato con Pdvsa a Eaton Global Services Limited, empresa registrada en Hong Kong en la cual Raúl Gorrín posee el 100% de las acciones y la cual finalmente recibió la totalidad de los dólares de Pdvsa".
Fuente: Primer Informe