El medio Axios publicó que la soledad en EEUU, que se disparó durante el confinamiento por la pandemia del COVID, sigue siendo una "crisis" de salud pública. Y para colmo de males, los omnipresentes chatbots impulsados por IA podrían hacer que el contacto humano real sea aún más escaso.
El Político
La soledad es un estado de aislamiento, que puede deberse a una elección propia, imposición, enfermedades contagiosas, problemas de salud mental o trastornos emocionales.
China, que no deja pasar la oportunidad de abrirse paso en su proceso de dominación en todos los órdenes, abrió el camino para desplegar IA contra la soledad.
Desde 2019, Xiaoice -el chatbot de Microsoft centrado en China- ha desarrollado una audiencia de 660 millones de usuarios.
Xiaoice fue entrenada para aprender habilidades de Inteligencia Emocional antes que las de Coeficiente Intelectual, para que los usuarios vean a "ella" como una amiga.
Microsoft admite que "a veces la línea entre realidad y fantasía se difumina. Recibe cartas de amor y regalos".
¿Por qué es importante?
A largo plazo, a los expertos les preocupa que la IA pueda alejar aún más a las personas de las relaciones y conversaciones que necesitan. Pero a corto plazo, ya se están creando compañeros, mascotas y servicios de apoyo a la salud mental para luchar contra la epidemia de soledad.
Por ejemplo, en EEUU no hay suficientes terapeutas, consejeros y cuidadores para atender a todas las personas que se sienten solas, mientras que los servicios basados en la IA pueden ampliarse a regiones mal atendidas y ofrecerse 24 horas al día, 7 días a la semana.
Tres de cada cuatro estadounidenses dicen sentirse solos, y Gallup calcula que 44 millones experimentan una "soledad significativa", reportó Axios.
El cirujano General Vivek Murthy afirma que los efectos pueden ser equivalentes a fumar hasta 15 cigarrillos al día.
Sí, pero Algunos expertos en salud mental temen que los riesgos de las herramientas de IA que ofrecen servicios de salud sin aprobación regulatoria superen los beneficios potenciales.
En el lado positivo, los defensores señalan una lista de aplicaciones en las que la IA puede proporcionar cierto alivio de la soledad.
Los terapeutas virtuales pueden beneficiar a los veteranos reacios a abrirse a una persona y a las personas que tienen dificultades para acceder a la terapia en persona en su lengua materna.
Entre líneas
Las startups combinarán el aprendizaje automático y la psicología del comportamiento para extraer datos de nuestras emociones.
El Dr. Nirit Pisano, jefe de psicología de Cognovi Labs, dijo a Axios que ayudar a la IA a leer mejor cómo nos inclinamos a pensar y actuar en ciertos estados emocionales abre la puerta a la asistencia 24/7, a una mayor autocomprensión y a sistemas que pueden empujarnos hacia comportamientos útiles o servicios de emergencia.
Pero un público que ya desconfía de la vigilancia digital impulsada por la publicidad y los algoritmos de IA sesgados podría pensárselo dos veces antes de compartir datos sobre el estado de ánimo con chatbots con ánimo de lucro.
No obstante, algunos expertos abogan por un enfoque de la inteligencia artificial centrada en el bienestar de los seres humanos pero desde la confiabilidad.
Las personas deben poder confiar en la IA ya que es la única manera de que se puedan beneficiar completamente de ella.
En las relaciones humanas, la confianza es clave para llegar a conseguir un mutuo beneficio para todas las partes en la situación que sea (por ejemplo, comprar, vender, negociar, etc.), y no lo va a ser menos si en lugar de tratar con personas se está haciendo con máquinas o software dirigidos por algoritmos que no se pueden tocar, que en muchos casos son opacos a los ojos en cuanto a su funcionamiento, y que van a jugar un enorme papel en la vida dentro de poco tiempo.
La confiabilidad incluye la confianza en la tecnología; en las reglas, leyes y normas que rigen la inteligencia artificial, y en los modelos de negocios de los servicios, productos, y fabricantes de IA.
Los sistemas deben diseñarse de manera que todos los ciudadanos puedan usar los productos o servicios, independientemente de su edad, estado de discapacidad o estado social.
De manera particularmente importante considerar la accesibilidad para personas con discapacidades, que son una categoría horizontal de la sociedad, presente en todos los grupos sociales.
La no discriminación es otro requerimiento y se refiere a la variabilidad de los resultados de la IA entre individuos o grupos de personas en función de la explotación de las diferencias en sus características que pueden considerarse de manera intencional o no (como el origen étnico, el género, la orientación sexual o la edad), y que pueden afectar negativamente a tales individuos o grupos.
El respeto a la privacidad es también muy importante. La privacidad y la protección de datos deben estar garantizadas en todas las etapas del ciclo de vida del sistema de IA, según las Directrices éticas sobre IA.
Cómo ayuda la Inteligencia Artificial
Para dirigir el funcionamiento o "comportamiento" de las IA, los programadores utilizan algoritmos y scripts, y así logran que produzcan frases en respuesta a los mensajes de los usuarios, de forma automática.
Los programadores trabajan con escritores para determinar qué tipo de puntuación, uso de emojis e incluso juego de palabras puede usar el bot.
Así, el programador puede entrenar a una IA para que reconozca ciertas palabras claves, por ejemplo, "deprimido", "tristeza", "solo" o "angustia", e interrogue al usuario mediante preguntas para conocer el origen de esas sensaciones.
Estos guiones, como se explica en una publicación de The Conversation, replican una táctica común en la terapia cognitivo-conductual: hacer preguntas. Los bots de terapia de IA alientan a las personas a desahogar sus frustraciones y luego les piden que reflexionen sobre esas experiencias o emociones.
Los expertos señalan que incluso cuando la respuesta del bot es amplia o inespecífica, las personas pueden encontrar catártico el proceso de escribir o expresar sus pensamientos.
Aún se necesitan más estudios para comprobar si los chatbots son útiles para aliviar la soledad, u otros problemas mentales como la ansiedad o depresión, aunque todo parece indicar que son efectivos.
Pueden comunicarse simultáneamente con numerosos usuarios, por lo que es una gran herramienta para las personas que buscan expresarse de forma rápida y anónima.
Es importante recordar que los chatbots no son una alternativa o reemplazo para los terapeutas o profesionales de la salud, y solo deben funcionar como un complemento frente a trastornos o problemas mentales y emocionales.
En resumen
Las conversaciones con IA pueden ser de gran ayuda para el 77% de los estadounidenses que afirman querer envejecer en su propio hogar. Más allá de las conversaciones triviales, los acompañantes de la IA pueden ayudar a detectar caídas.
La asistencia ininterrumpida de la IA puede servir de apoyo fuera del horario laboral para quienes ya reciben ayuda clínica, como el chat basado en las notas individuales de cada paciente.
Las zonas rurales -donde 3 de cada 4 condados carecen de dinero para ampliar el acceso a los servicios de salud mental- también podrían beneficiarse.
Las mascotas con inteligencia artificial son ya una industria en crecimiento.
Han mejorado desde la moda de los Tamagotchi de los años 90 y pueden incluir personalidades programadas realistas y características físicas como pelaje y colas que se mueven.
Las mascotas vivas aportan beneficios bien establecidos, como la reducción de la soledad y la ansiedad de sus dueños, y los promotores de las mascotas de IA afirman que ofrecen ventajas similares a quienes no pueden asumir las responsabilidades y los costes de mantener una mascota viva.
Pensemos en las personas con demencia que no pueden alimentar o pasear a sus mascotas según su horario, o en los habitantes de edificios que prohíben tener mascotas.
Tom Stevens, director general de Tombot, una startup que proporciona perros robot de compañía, afirma que sus dispositivos son una alternativa a los medicamentos psicotrópicos que "convierten a los ancianos en zombis".
Cuanto antes se implante la IA como parche para la salud mental, antes descubriremos si es beneficiosa o perjudicial.