La policía de Texas detuvo a una mujer de 34 años por “abusos médicos” a su hijo después de que se conoció que llevó al menor, de 8 años, hasta 323 veces ante los médicos y que fue sometido a 13 intervenciones quirúrgicas.
La aprehensión se produjo después de la última visita a un servicio de urgencias, donde el menor llegó con convulsiones que los sanitarios creyeron que no tenían un origen natural, y que podían haber sido inducidas por su madre, reseña 20minutos.es.
Varios medios de comunicación hacen referencia al temor de un doctor de que la madre hubiera pasado de “exagerar” síntomas a “inducirlos”.
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— El Político (@elpoliticonews) December 14, 2017
El expediente médico del menor, Christopher, revela que había visitado 323 veces el médico, la primera vez en 2009 y cuando solo contaba con 11 días de vida.
A lo largo de su infancia se había visto postrado en sillas de ruedas en varias ocasiones y con cámaras de oxígeno. Incluso su madre intentó que le trasplantaran un pulmón y quiso recabar fondos para dicha operación.
El niño se recupera en un centro de tutela, mientras su padre hace las gestiones para poder hacerse cargo.
