Un juez federal de Estados Unidos aprobó que prosiga la venta de las preciadas refinerías venezolanas CITGO asentadas en territorio estadounidense, y autorizó a una minera canadiense cobrarse 1.400 millones de dólares que perdió por la estatización efectuada por el fallecido presidente socialista Hugo Chávez.
El Político
El juez Leonard P. Stark, de la Corte Federal de Distrito, en Delaware, emitió su orden después de que la Corte Suprema de Estados Unidos le ratificara el lunes un fallo previo en el que había autorizado la liquidación de CITGO.
Antes de proceder a la venta de CITGO, la quebrada minera canadiense Crystallex debe conseguir un permiso del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que había blindado temporalmente a la oposición venezolana para que no perdiera CITGO.
Crystallex y los abogados que representan a Venezuela también tienen que ponerse de acuerdo en cómo se efectuará la venta de CITGO, según el fallo más reciente de Stark.
Sin embargo, el embajador del gobierno interino de Venezuela en EEUU, Carlos Vecchio, aseguró que “nadie puede embargar a CITGO sin una autorización de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros".
Vecchio agregó que “existe una protección de nuestros activos a través de una Orden Ejecutiva de la Administración de los Estados Unidos…La decisión del juez de Delaware implica reanudar el juicio de Crystalex quien trata de cobrar una deuda generada por una expropiación ejecutada por Chàvez. Nosotros ejerceremos los recursos legales necesarios”, puiblicó el di¿lomático a través de su cuenta en la red social de Twitter.
Chávez tomó control de la concesión de la minera de oro en Venezuela, así como las operaciones de otras compañías internacionales como parte de su revolución bolivariana que ha dejado a la nación sudamericana en una crisis política y económica.
Crystallex demandó a Venezuela para recuperar sus inversiones perdidas. El caso es único porque la corte permitió a la minera embargar activos a la compañía matriz de Citgo, la empresa estatal PDVSA, tras determinar que Caracas había eliminado los vínculos entre el gobierno y su firma petrolera.
Venezuela ha sido propietaria de CITGO desde la década de 1980 como parte de PDVSA. Tiene tres refinerías, en Luisiana, Texas e Illinois, además de una red de oleoductos que cruzan 23 estados. Suministra entre 5% y 10% de la gasolina que se consume en Estados Unidos.
Fuente: Infobae