El jefe fronterizo del presidente Joe Biden, Alejandro Mayorkas, aseguró que desconoce la tasa de mortalidad de los migrantes que se dirigen a su frontera, a pesar de que tiene miles de agentes que siguen de cerca el flujo de migrantes hacia Estados Unidos.
El Político
El pasado viernes le preguntaron “¿Qué porcentaje de personas mueren tratando de ingresar a este país?”. Su respuesta fue: “No lo sé… [es] un porcentaje”, respondió el fanático pro-inmigración nacido en Cuba.
Mayorkas ha descrito repetidamente su apoyo a los migrantes indocumentados y ha financiado a miles de agentes y contratistas para rastrear, contar, alimentar y transportar en autobús a al menos seis millones de ciudadanos que han cruzado al país.
Mayorkas, un abogado, rápidamente esquivó la pregunta del porcentaje diciendo: “Les compartiré que después de haber hablado con familias que cruzaron el Darién –el área entre Colombia y Panamá– el sufrimiento y el trauma son extraordinarios”.
El jefe fronterizo, quien fue acusado por la Cámara por la crisis migratoria, habló en el Club Económico de Washington D.C con David Ruberstein, presidente del lugar.
Los medios del establishment han mostrado poca preocupación por la cantidad de inmigrantes "atraídos a la muerte" por las políticas de fácil migración de Biden, o incluso por la cantidad de estadounidenses asesinados por la bienvenida de Mayorkas a los inmigrantes ilegales.
Pero… en El Político tenemos las cifras
La agencia de Mayorkas admitió la muerte fronteriza de al menos 1.000 migrantes del sur en 2022. La cifra fue aproximadamente el doble de la cifra de muertes fronterizas de 2021, de 568 migrantes.
Miles de migrantes han muerto viajando hacia el norte del país, especialmente en el sendero selvático del Darién en Panamá. Aunque Mayorkas estaría intentando de reducir el número de muertos, la realidad es que ha gastado cientos de millones de dólares para financiar rutas migratorias semiilegales y semicubiertas supervisadas por su agencia, no por los cárteles criminales y los coyotes.
“Yo advertiría [a los inmigrantes] y los alentaría a… aprovechar las vías legales que hemos establecido para que no arriesguen sus vidas en manos de los contrabandistas”, aseguró.
Mayorkas reconoció que muchos migrantes cruzan la frontera en busca de empleo y vivienda, no por asilo político. "La realidad es que las personas solicitan asilo cuando en realidad huyen de la pobreza y de la violencia generalizada, y eso no constituye un caso de asilo", dijo.
Los inmigrantes de Mayorkas siguen muriendo en sus rutas supuestamente más seguras. En febrero de 2023, al menos 39 inmigrantes murieron en un accidente de autobús. Muchos inmigrantes también son violados y robados al intentar llegar a la frontera.