El presidente de la República Argentina estuvo presente en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), un evento clave del Partido Republicano de Estados Unidos, llevado a cabo en Washington D.C. Contundente apoyo de Donald Trump y un discurso de Milei mucho menos ¨explosivo¨ comparado con el que pronunciara en el Foro Económico de Davos, Suiza, el pasado mes de Enero.
Poder & Dinero
La participación de Javier Milei en la CPAC el sábado 24 de febrero marca, por ahora, el final de una serie de encuentros políticos internacionales muy relevantes que el mandatario ha tenido desde que asumiera el cargo, el 10 de Diciembre de 2023. Isacc Herzog y Benjamín Netanyahu, presidente y primer ministro respectivamente de Israel; el Papa Francisco en El Vaticano; la presidente del Consejo de Ministros de Italia, Georgia Meloni; el ministro de relaciones exteriores de Francia, Stéphane Séjourné, en Buenos Aires. El Secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken y el senador republicano por el estado de Florida, Marco Rubio, también visitaron a Milei en la capital de la República Argentina.
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El broche de oro para esta apretada agenda internacional ha sido, sin dudas, la presencia de Milei en Washington D.C. como orador en la CPAC, cuyo momento culminante estuvo en el discurso del ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que precedió al del mandatario argentino. A diferencia de Trump, Milei estuvo medido, pausado y, para algunos, aburrido. La audiencia esperaba una repetición de sus contundentes palabras en Davos, pero el libertario eligió una exposición eminentemente focalizada en la economía para criticar al comunismo, con referencias difusas o desconocidas para los presentes como ¨el óptimo de Pareto¨ y ¨las funciones de producción convexas que no encuentran un máximo¨. Pocas referencias a la política interna de Estados Unidos, lo que al decir de algunos bien informados, no fue casual. Esa ¨omisión¨ habría sido acordada con el embajador de Estados Unidos en la Argentina, Marc Stanley, para no parecer descortés con el partido demócrata (mucho menos estando alojado en la residencia particular de Anthony Blinken) luego de haber recibido en Buenos Aires al Secretario de Estado norteamericano pocas horas antes de viajar a Washington. Conociendo la admiración de Milei por Trump, apoyar las propuestas de este habría significado una crítica directa a la Administración Biden, de la cual Blinken forma parte. Por este u otro motivo, el discurso no estuvo a la altura de lo esperado.
Lo expresado precedentemente de ninguna manera le quita mérito a un gran logro político de Milei: en poco más de dos meses de gobierno ha conseguido volver a colocar a la República Argentina en la agenda internacional con un claro alineamiento con la mayoría de las democracias occidentales. Decimos con la mayoría, no todas. La evolución de las históricas relaciones con Brasil es una incógnita, teniendo en cuenta el acercamiento del gobierno de Luis Ignacio ¨Lula¨ Da Silva con Rusia, Irán, China; y sus críticas al accionar de Israel en el conflicto en Medio Oriente luego del ataque del grupo terrorista Hamás producido el 7 de Octubre de 2023. España, otro país muy ligado a los sentimientos de los argentinos, también genera muchas dudas.
Respeto, promesas de apoyo a su gestión, agradecimiento a su compromiso y solidaridad en el caso de Israel y hasta admiración, han sido características distintivas del trato que Milei ha recibido como visitante, o anfitrión. El presidente argentino es hoy una figura reconocida y escuchada en la comunidad política internacional. Pero ¿qué pasa en su propio país?
Es en Argentina donde debe librar su más dura ¨guerra¨, de la cual parece estar ganando algunas batallas. La inflación, por ejemplo, si bien sigue siendo muy alta, está marcando una tendencia descendente desde el 25% del mes de Diciembre de 2023 al 20% en Enero de 2024. El ministro de economía, Luis Caputo, se ha aventurado a afirmar que la baja será aún mayor en Febrero. Una declaración de la que muchos, entre ellos nosotros, dudan ya que durante ese mes y el de Marzo se hará sentir fuertemente el ajuste las tarifas de los servicios públicos y otros conceptos críticos para las economías familiares (la energía eléctrica tendrá aumentos que oscilan entre el 300% y 500%, la medicina prepaga superará el 100%, las cuotas de las escuelas privadas el 80%, y los impuestos a las propiedades entre 200% y 300%). En el mejor de los casos y con muy buena voluntad a la hora de elaborar los índices de inflación, esta debería rondar nuevamente el 20%.
Contra las críticas hacia el gobierno que esta situación genera, los funcionarios del área económica destacan que por primera vez, desde 2012, se ha logrado un superávit fiscal. El logro sería inigualable, si no fuera por el costo. La caída del déficit no se ha logrado por un aumento de los ingresos fiscales sino por la licuación de los gastos del Estado por efecto de la inflación; la reducción, congelamiento o supresión de partidas presupuestarias (despidos de personal y actualizaciones de sueldos por debajo de la inflación), castigo a las jubilaciones y pensiones que no llegan a cubrir el 20% de la denominada ¨canasta de pobreza¨; suspensión del programa de jerarquización de los sueldos de las tres armas de las Fuerzas Armadas, cuyos integrantes ganan menos que un comisario de policía y recorte o directamente suspensión de las transferencias de dinero a las provincias. Como resultado, Milei ya ha tenido que soportar un paro general de actividades a los 45 días de haber asumido, organizado por la Confederación General del Trabajo (CGT), varias huelgas parciales de los gremios del transporte (ferroviarios y empresas de colectivos), personal de la salud (clínicas, sanatorios y hospitales) y se espera una medida similar del gremio que agrupa al personal aeronáutico, lo cual transformará a los aeropuertos en un verdadero caos. Todo esto, además de las continuas manifestaciones en la vía pública de las denominadas ¨organizaciones sociales¨ (uno de los ¨negocios¨ del populismo kirchnerista más golpeado por la política social que lleva adelante el Ministerio de Capital Humano), que entorpecen la circulación de quienes viven, trabajan o están de paso por la ciudad de Buenos Aires.
Esta puja distributiva entre Estado y los distintos sectores de la sociedad de un país parece casi lógica en un contexto de crisis económica como el que sufre Argentina. Siempre y cuando los efectos sean controlables para el gobierno de turno. En este sentido, y teniendo en cuenta que Argentina es una república federal, adquiere mucha significación en el manejo de la crisis la posición que asuman, de apoyo u oposición, los gobernadores de cada una de las provincias. Justamente, en este momento, el problema más importante que enfrenta el gobierno de Javier Milei es una ¨rebelión¨ de mandatarios provinciales (muchos de ellos pertenecientes a provincias que han apoyado electoralmente a Javier Milei, a pesar de no integrar su partido político ¨La Libertad Avanza¨).
Una polémica entre el gobernador de la provincia de Chubut, Ignacio Torres, y el propio Javier Milei, por, justamente el no envío de partidas de dinero, se ha convertido en un ida y vuelta de acusaciones e insultos personales que amenaza en convertirse en otra crisis, pero institucional. Chubut junto a Río Negro y Santa Cruz forman la región conocida como Patagonia Argentina, donde se encuentran los mayores recursos energéticos del país, principalmente gas y petróleo. Torres puso como fecha límite para recibir los fondos reclamados, el próximo miércoles 28 de Febrero. Caso contrario, no permitirá el tránsito de ningún medio de transporte de combustible que tenga como destino la ciudad de Buenos Aires. Las restantes provincias patagónicas y los gobernadores del Propuesta Republicana-PRO (el partido político que fundó Mauricio Macri) han manifestado su apoyo a la provincia de Chubut. Paradójicamente, Patricia Bullrich, Ministro de Seguridad del actual gobierno argentino, quien ha manifestado que utilizará la Gendarmería Nacional para garantizar la provisión del combustible a Buenos Aires, es la presidente del PRO, la agrupación política a la cual pertenece Torres. El descalabro político interno, contrasta fuertemente con la gestión internacional de Milei.
Hay quienes afirman, con fundamentos atendibles, que las recientes presencias de Anthony Blinken y Marco Rubio en Argentina no fueron sólo una gentileza para Milei, sino que vinieron a confirmar en persona la real fortaleza (o debilidad) institucional, legislativa, política y social del gobierno. Más allá de las amables reuniones con Milei, algunos datos que recibieron de sus colaboradores locales los dejaron preocupados. Encuestas que no circulan públicamente muestran una caída importante en la imagen de Javier Milei. Caída que se acentúo significativamente luego de los recientes aumentos dispuestos para el transporte en trenes y colectivos. La participación del costo de traslado en el ingreso de los asalariados oscila entre el 25% y 30% luego del aumento. A esto, como dijimos, deberá sumarse el tsunami de aumentos de los meses de febrero, marzo y abril, mientras el electrodoméstico preferido de Milei, ¨la licuadora¨ sigue triturando bolsillos y economías familiares.