El Gobierno italiano estudia un plan para controlar la inmigración ilegal que contempla la apertura en todas las regiones de los llamados en Italia centros de identificación y expulsión (CIE) y el aumento del número de repatriaciones de inmigrantes ilegales, informaron hoy los medios locales.
Según estas informaciones, el Ministerio italiano del Interior está elaborando un plan que someterá a votación en el Parlamento en las próximas semanas y que contempla, entre otras medidas, la apertura en cada una de las veinte regiones del país de un CIE, llamado en España centro de internamiento de extranjeros y en Italia centro de identificación y expulsión.
Actualmente en Italia existen cuatro CIE, por lo que la intención del Ejecutivo de Paolo Gentiloni -que sustituye en el cargo a Matteo Renzi desde que presentó su denuncia por el fracaso en el referéndum del 4 de diciembre- es quintuplicar la cifra.
El plan también incluye la identificación de cada una de las personas que llegan a Italia para proseguir su camino hacia Europa y el aumento y la aceleración de los procesos de repatriación de inmigrantes ilegales.
De esta manera, el Gobierno italiano trata de contener la inmigración ilegal en un momento en el que Europa se enfrenta al gran desafío del drama de los refugiados.
Solo en Italia este año han llegado 181.283 inmigrantes, un 15 % más respecto a la de 2015, cuando llegaron 153.842 personas.
El alcalde de la ciudad siciliana de Palermo, una de las que más acoge a inmigrantes y refugiados que quieren acceder a Europa por Italia, Leoluca Orlando, ha criticado con dureza esta iniciativa y ha afirmado que es "un salto hacia atrás culturalmente hablando".
Con información de: EFE