The Jerusalem Post informó que cualquier individuo que sea detenido en público por primera vez con el narcótico, recibirá únicamente una multa en lugar de ser enviado a prisión. No obstante, aquellos que incurran más de cuatro veces en esta acción, podrían enfrentar penas de cárcel.
La propuesta contó con varios partidarios, entre ellos el ministro de Seguridad Pública, Gilad Erdany, y el ministro de Justicia, Ayelet Shaked. El comité gubernamental israelí está preparando las recomendaciones y cambios necesarios para aplicar la despenalización en los próximos dos meses.
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Al respecto, la parlamentaria del partido político israelí Meretz, Tamar Zandberg, había señalado anteriormente que la aprobación de la medida podría significar que Israel estaba "avanzando hacia una nueva era".
Con información de The Jerusalem Post