El cabecilla de Gürtel, Francisco Correa, invocará la sentencia del caso Nóos cuando recurra al Supremo su condena en el caso Fitur, al observar su defensa una "desproporción" con respecto a la aplicación de las penas y la imposición de responsabilidades civiles entre una y otra por delitos similares.
El abogado de Correa, Juan Carlos Navarro, ha adelantado que ese será uno de los argumentos que esgrimirá en el recurso de casación que ya está preparando y con el que pretende conseguir rebajarle los 13 años de condena que le llevaron a ingresar en prisión el pasado martes ante el riesgo de fuga, informa EFE.
De esa "desproporción", Navarro concluye que la de Nóos, con condenas más leves —como la de Iñaki Urdangarin a 6 años—, es "una sentencia sensata", "ajustada a derecho" y que contiene bastantes fundamentos sobre la aplicación de penas en delitos habituales en este tipo de causas de corrupción: cohecho, prevaricación, malversación, tráfico de influencias y falsedad documental.
Por contra, el delito de malversación que le ha valido a Correa una pena de 6 años, el grueso de su condena en el caso Fitur, es "completamente desproporcionado" al serle aplicado el tipo más alto. Recuerda su defensa que ese delito se castiga de forma diferente si es cometido por un funcionario o un particular, y que a este último se le ha considerado siempre como "una especie de cómplice" en el delito que obligatoriamente comete un servidor público, "por lo que la condena debe ser diferente" para uno y otro.