Los socorristas trabajaban este domingo en Sri Lank, isla peninsular de Asía a distribuyendo ayuda humanitaria a medio millón de personas desplazadas por las peores inundaciones en la isla en 10 años, que provocaron la muerte a al menos 146 personas.
Las menores precipitaciones permitieron que el agua bajase en algunas zonas, permitiendo llevar ayuda a los afectados que en algunos casos lo perdieron todo.
Numerosas localidades continuaban sin embargo bajo el agua el domingo, según responsables locales. Unidades médicas fueron enviadas a las zonas más afectadas para intentar impedir enfermedades como el cólera.
"Tenemos la experiencia para enfrentar este tipo de situación", declaró el ministro srilanqués de Salud, Rajitha Senaratne.
El viernes, las fuertes lluvias provocaron los peores deslizamientos de tierra e inundaciones en 14 años en el sur y el oeste de la isla.
Al menos 146 personas murieron, pero el centro de gestión de catástrofes indicó que 112 personas continuaban desaparecidas el domingo.
Rajitha Senaratne afirmó que la mayoría de las víctimas murieron en los deslizamientos de tierra. Medio millón de personas están desplazadas, agregó.
La organización no gubernamental Save The Children estimó que una décima parte de esos desplazados tienen menos de cinco años.
El ejército movilizó helicópteros, barcos y vehículos anfibios para asistir a las víctimas y distribuir alimentos y productos de primera necesidad.
Sri Lanka también pidió ayuda internacional. India envió un buque militar con unidades médicas.
La ONU anunció que enviaría contenedores de agua y pastillas para purificar agua. La Organización Mundial de la Salud (OMS) suministrará medicamentos en las zonas afectadas.
AFP