Esta semana una investigación reveló que funcionarios de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) emplearon bases de datos privadas para arrestar inmigrantes ilegales. Descubre qué ocurrió.
El Político
Investigadores de la facultad de leyes de la Universidad Georgetown descubrieron que funcionarios de ICE buscaron a inmigrantes ilegales rastreándolos en una base de datos privada ubicada en Toronto, Canadá.
La base de datos privada que usó ICE tiene "cientos de millones de registros de teléfonos, agua, electricidad y otros servicios públicos para ubicar y perseguir a infractores de la ley de inmigración", así lo demuestra una investigación de la Universidad Georgetown.
Esos documentos públicos que encontraron los investigadores de la facultad de leyes de la Universidad Georgetown, ellos dieron toda la información el periódico The Washington Post.
"El uso de la base de datos privada, por parte de ICE , es otro ejemplo de cómo las agencias gubernamentales explotan fuentes comerciales para acceder a información que no están autorizadas a recopilar por sí misma", destaca el diario estadounidense.
CLEAR: Más de 400 millones de nombres, direcciones y registros
Según el estudio de la Universidad de Georgetown, la base de datos que uso ICE se llama CLEAR. "Posee más de 400 millones de nombres, direcciones y registros de servicio de más de 80 empresas de servicios públicos", detalló The Washington Post.
Esas empresas dan los siguientes servicios públicos: electricidad, aguas, gas, teléfono, Internet y televisión por cable.
CLEAR también incluyó “miles de millones de registros relacionados con el empleo, la vivienda, los informes crediticios, los antecedentes penales y los registros de vehículos de las empresas de servicios públicos en los 50 estados, el Distrito de Columbia, Puerto Rico, Guam y las Islas Vírgenes de Estados Unidos”, destacó Univisión.
Una característica adicional que tiene CLEAR es que se actualiza diariamente. Es decir, cuando una persona se muda o se suscribe a a un nuevo servicio público se refleja, y ayuda a la búsqueda de ICE.
¿Quién hizo CLEAR y por qué?
La base de datos CLEAR pertenece al emporio de datos y medios Thomson Reuters.
Esta empresa vende suscripciones de soluciones de software de investigación legal a muchísimas empresas y agencias públicas. No obstante esta compañía no dio la lista total de los clientes a CLEAR, reportó The Washington Post.
Asimismo, Thomson Reuters comentó en materiales de marketing, que la base de datos CLEAR la usaron diferentes organizaciones como la policía en Detroit.
Thomson Reuters obtuvo la data de servicios públicos de informes crediticios, Equifax.
Mientras, registros de compras federales señalan que los departamentos de Defensa, Justicia y DHS, son algunas de las agencias federales con contratos para emplear esos datos.
Base de datos para perseguir inmigrantes ilegales
Durante el mes de febrero de 2020, The Wall Street Journal (WSJ) denunció que algunas agencias federales usaron datos de ubicación de móviles para perseguir inmigrantes ilegales, y aplicarles la ley de inmigración según la política de ‘tolerancia cero’ de Trump.
En esa oportunidad, las agencias federales compraron el acceso a una base de datos comercial. Con las que rastrea y mapea los movimientos de millones de teléfonos celulares.
Diversas fuentes le dijeron a WDJ que los funcionarios del gobierno “la usaban para la implementación de la ley de inmigración y la seguridad fronteriza”.
“Los datos de ubicación (de infractores de la ley de inmigración) se obtienen de aplicaciones de teléfonos celulares comunes, incluidos juegos, clima y comercio electrónico. Para las cuales el usuario ha otorgado permiso para registrar la ubicación del teléfono”, detallaron las fuentes.
Tecnología y deportaciones
En enero de 2018 el National Immigration Law Center (NILC) denunció que ICE uso bases de datos e intercambiando información con otras dependencias federales y privadas para deportar inmigrantes.
Esto viola la ley al compartir información que fue recopilada para otros objetivos.
En esa época, NILC aseveró que los defensores de los derechos de los inmigrantes estaban “particularmente interesados en comprender cómo ICE interactúa con las agencias policiales estatales y locales".
Añadió, "Así como con los departamentos estatales de vehículos motorizados. Debido a que el contacto inocente con la policía o el DMV pone en riesgo de deportación a los inmigrantes”.
Por su parte, los investigadores de la Universidad de Georgetown concluyeron que el uso de bases de datos privadas para deportar a las personas, deteriora la confianza de los ciudadanos en los servicios públicos. Además de dejarlos indefensos antes las políticas migratorias.