El ciberataque del cual fue objeto la semana pasada el gigante productor de carne de res y cerdo JBS USA le obligó a ejecutar cierres en sus plantas tanto en Norteamérica como en Australia. En buena medida la firma ha disipado preocupaciones sobre una interrupción importante de sus operaciones. Pero los expertos advierten que evitar la crisis de suministros de productos cárnicos, dependerá de la rapidez con la que se resuelva el problema.
El Político
Desde un ángulo la administración demócrata de Joe Biden estima que el hackeo muy probablemente fue ejecutado por una organización criminal de Rusia Y desde otro el gobierno australiano dijo que la policía estadounidense está tomando la iniciativa en la investigación del ataque.
Conforme a la versión informativa digital de la cadena noticiosa CNN en español, David Littleproud, ministro australiano de Agricultura, Sequía y Manejo de Emergencias, no cree posible que sobrevenga una notoria escasez de carne roja. Añadió que JBS está trabajando en estrecha colaboración con las agencias de aplicación de la ley aquí y en el extranjero para volver a estar en funcionamiento y hacer que los responsables rindan cuentas.
Declaró: “Pero obviamente nos preocupa que hoy en día haya operaciones limitadas en las instalaciones de JBS en Nueva Gales del Sur y Victoria. Es posible que mañana (el jueves) se reanuden algunos trabajos en Queensland. Esperamos que vuelvan a estar a plena capacidad pronto, pero no hay un cronograma definitivo”.
JBS are working closely with law enforcement agencies here and overseas to get back up and running and to bring those responsible to account. pic.twitter.com/KMh5QsPOUQ
— David Littleproud MP (@D_LittleproudMP) June 1, 2021
JBS asegura poder abastecer a sus clientes
El Consejo Australiano de la Industria de la Carne notificó que no hay evidencias de que el ciberataque ocasionará un impacto negativo importante. Ni en la oferta nacional de carne roja ni en productos porcinos de Australia.
Contrariamente un representante del Sindicato Internacional de Trabajadores Comerciales y de Alimentos declaró el martes por la noche que todas las plantas de carne de res de JBS en territorio estadounidense estaban literalmente paralizadas.
Al mismo tiempo voceros de JBS aclararon que la gran mayoría de sus plantas estarían operativas a partir del miércoles. Que incluso JBS USA y Pilgrim’s pudieron enviar productos desde casi todas sus instalaciones para abastecer a los clientes. Las marcas de la compañía incluyen Pilgrim’s, Great Southern y Aberdeen Black.
Del lado oficial, el Departamento de Agricultura de EEUU dijo que se ha acercado a los procesadores de carne en todo el país. A quienes alentó a acomodar capacidad adicional y ayudar a mantener la cadena de suministro en movimiento.
Fuente: CNN