Después de que la pandemia del COVID-19 se controló en el mundo se empiezan a desarrollar algunas afecciones médicas en quienes se colocaron las vacunas ARNm.
EL Político
Se sabe que las vacunas dentro de la contingencia sanitaria eran la mejor opción para la defensa de la humanidad ante esta amenaza. Sin embargo, en la actualidad se están dando a conocer algunos factores negativos de estas vacunas en el cuerpo humano.
A través de una investigación científica se conoció que las vacunas ARNm contra la COVID son el motivo de la formación de proteína de pico. Esto se da en las células del corazón, las mismas causan diferentes anomalías.
Según un artículo de investigación científica explica que al observar las células cardiacas humanas y de ratas se demuestra que a las 48 horas posteriores de la vacunación se forman estos picos.
Esta investigación se da en Alemania. Dichas células de pico se detectaron en las células cardiacas, tanto en las vacunas Pfizer como las de Moderna. Ambas desarrollaron estas anomalías celulares.
Las singularidades se dan de manera diferente con las diferentes vacunas. Estas sugieren una reacción de toxicidad de ARNm.
"Los hallazgos respaldan tanto el diagnóstico como el tratamiento de los eventos cardíacos tras la vacunación contra la COVID basada en ARNm", escribieron los autores, y añadieron que los hallazgos pueden explicar los síntomas cardiacos persistentes entre los pacientes con COVID prolongada.
Las afecciones
Una de las consecuencias posteriores a estos picos celulares que se evidenciaron fueron miocarditis.
En 48 horas, los investigadores detectaron proteínas de pico en ambos cultivos celulares donde se suministraron las vacunas, y notaron anomalías en las contracciones cardíacas.
Los investigadores registraron las contracciones cardíacas en un video complementario, comparando las contracciones normales en una célula cardíaca de rata no vacunada (1A) con células vacunadas.
Las células vacunadas con Pfizer mostraron contracciones más fuertes y sostenidas (1B) debido al aumento de la actividad de la proteína quinasa A (PKA). Los niveles de PKA están relacionados con el rendimiento cardíaco; cuanto más alto sea el nivel de PKA, más fuertes serán las contracciones cardíacas.
También se detectaron proteínas de pico en 48 horas en el cultivo celular de células humanas. Los autores concluyeron que, a nivel celular, los efectos de las vacunas contra la COVID-19 parecían alinearse más estrechamente con la miocardiopatía que con la miocarditis.
Un diagnóstico de miocarditis y pericarditis indica inflamación y daño a las células del músculo cardíaco, sin embargo, es posible que los médicos no encuentren signos de daño e inflamación en los análisis de sangre y de imagen.
A su vez se explicó que "la miocarditis se presentará con un corazón dilatado y pacientes con problemas para respirar e insuficiencia cardíaca", exponía el Dr. McCullough a esta revista científica. "Lo que estamos viendo con las vacunas no es insuficiencia cardíaca. En realidad, es un paro cardíaco, que es principalmente un problema eléctrico de señalización".
Posible relación con el paro cardíaco
Si bien el artículo indicó una anomalía principalmente en células animales, los resultados sugieren fuertemente la cardiotoxicidad de la vacuna.
"Los datos actuales de seguridad cardíaca preclínica apuntan a la necesidad de una reevaluación de la relación riesgo-beneficio de las vacunas contra el SARS-Cov-2 basadas en ARN, dada la indicación de su cardiotoxicidad", escribieron los autores.
Las anomalías cardíacas exhibidas en las células, probablemente causadas por la interrupción de RyR2 y el aumento de los niveles de proteína PKA, "son factores de riesgo de muerte cardíaca súbita, taquiarritmias ventriculares y disfunción contráctil", añadieron.
"Es muy preocupante", sobre todo porque las alteraciones del receptor RyR2 están directamente relacionadas con la muerte cardíaca súbita, dijo el doctor McCullough. "El patrón que estamos viendo es que las personas se vacunan y mueren durante el ejercicio, o mueren entre las 3 a.m. y las 6 a.m., nuevamente, donde hay un aumento de catecolaminas o estrés en el cuerpo".
Por ahora esta investigación continúa abierta hasta la confirmación de los resultados para luego plantear alguna postura diferente antes las amenazas biologías y las vacunas ARNm.