China pareciera encaminarse hacia un crecimiento sostenido, o por lo menos es lo que las "cifras oficiales" indican, pero surgen datos que hacen pensar que Pekín no está diciendo toda la verdad, y como es su costumbre, oculta detalles importantes.
El Político
Las cifras dadas a conocer por el régimen que encabeza Xi Jinping, hablan de un PIB que creció un 2,2% en términos trimestrales y un 4,5% en tasa interanual.
¿Por qué es importante?
Expertos de Julius Baer elevaron su previsión de crecimiento de 2023 para el gigante asiático hasta el 6% desde el 5,3% anterior, según lo publicado en el portal Bolsamanía.com.tidades financieras
Por su parte, entidades financieras como UBS son menos entusiastas y hablan de entre un 5,4% al 5,7%, o Moody’s, que maneja cifras entre 4% y 5%).
Todos coinciden en que hay mejoras en cuanto al crecimiento, basándose en la idea de que el gigante está bien encaminado para una recuperación post-Covid, y que dicha recuperación se apuntala por el consumo y los servicios.
Sin embargo, sigue habiendo dudas sobre China y sobre si el impulso de la recuperación perdurará.
Los expertos explican que la verdadera fuerza del último dato de PIB provino del consumo, y manifiestan sus miedos sobre la sostenibilidad de su repunte.
Aparecen las cifras "maquilladas"
Esos miedos se hacen patentes cada vez que China publica nuevos datos y que éstos vuelven a decepcionar, como sucedió este miércoles con la cifra de actividad manufacturera del mes de mayo, que cayó por segundo mes consecutivo, hasta 48,8, lo que supone una contracción más pronunciada que la registrada en abril (49,2).
Este dato ha llevado precisamente a los analistas a reacomodar o corregir sus previsiones del PIB del país para este año.
Así, las rebajan en este caso hasta el 5,6% desde ese 6% de hace solo un mes. Para la tasa de crecimiento intertrimestral, su estimación baja del 1,3% al 0,8%.
"Los PMI oficiales de mayo apuntan a una contracción más profunda en el sector industrial y a una ralentización del impulso de recuperación en el sector servicios", advierte el banco suizo. "La recuperación tras la reapertura se ha centrado estrechamente en la actividad de los servicios, mientras que el sector industrial se resiente del debilitamiento de la demanda exterior y de la moderación de la demanda interna de bienes", explica el banco suizo UBS en un informe.
Otro aspecto es la llamada recuperación de las ventas inmobiliarias, que parece haber sido efímera y que la inversión privada se ha mantenido débil.
"Dado que los principales motores del crecimiento se están debilitando, es probable que la dinámica de crecimiento se ralentice en los próximos meses más de lo que habíamos previsto inicialmente", reconoce el informe.
Una conclusión con dudas
El decepcionante PMI manufacturero ha llevado a que el país asiático recorte su previsión de crecimiento para el ao 2023, y la ha ubica por debajo de la estimación del 5% fijada por el gobierno de Pekín.
Según el Banco Mundial (BM), China crecerá un 4,9% en 2023 frente a su previsión anterior del 5,4%. En su opinión, es improbable que el crecimiento de China alcance el 8% en el segundo trimestre en medio de una débil demanda y a pesar de la comparación con la base baja del año pasado.
"La reapertura de China está perdiendo fuelle", y el PMI manufacturero oficial se mantendrá probablemente por debajo de la marca de 50 puntos en junio.