Al menos 21 personas fueron detenidas entre mayo y junio en Venezuela debido a su disidencia política con el gobierno, denunció la organización Human Rights Watch en un informe presentado en Buenos Aires, en el que también refirió torturas y abusos.
El documento señala que estos ciudadanos fueron acusados de planificar, instigar o participar en protestas contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro. También denunciaron que fueron torturadas y sufrir, entre otros abusos durante su detención, descargas eléctricas y golpes, dijo José Miguel Vivanco, director para las Américas de la organización.
HRW ha llevado a cabo investigaciones debido a la gravedad de las violaciones de los derechos humanos que se cometen en el país y la sistematicidad con que los agentes del Estado incurren en violaciones brutales, añadió.
Expresó su confianza en que la Organización de Estados Americanos avance para pedir al gobierno de Maduro la libertad de los presos políticos y el apego a la Constitución, la cual establece el referéndum revocatorio "que debe decidirse este año", expresó Vivanco, que fue expulsado en 2008 de Venezuela por un informe crítico del Poder Judicial.
El directivo hizo énfasis en que existe un grado enorme de concentración de poder que da lugar a la ausencia de un Poder Judicial independiente que sea capaz de frenar, de intervenir o de sancionar los abusos. “La regla en Venezuela es la impunidad total”, subrayó.
"A menos que se ejerza una enérgica presión regional, el gobierno venezolano seguirá creyendo que puede continuar castigando brutal y autoritariamente a la disidencia, sin que haya ningún tipo de consecuencias", concluyó.
Con información de El Nacional