El presidente de Guyana, Irfaan Ali, anunció el 18 de febrero que se ha iniciado una investigación exhaustiva sobre un "grave" ataque que resultó en heridas a seis soldados guyaneses en el río Cuyuni, cerca de la frontera con Venezuela.
Durante su declaración, Ali subrayó la seriedad del incidente, indicando que, aunque no se ha confirmado la identidad de los atacantes, es fundamental evaluar si se trata de una banda armada u otras organizaciones operando desde el lado venezolano. "Esto es grave, porque dispararon contra rangos uniformados", afirmó el presidente, según reportes de medios locales.
La Fuerza de Defensa de Guyana (GDF) informó que los soldados fueron emboscados el lunes por hombres armados enmascarados desde el territorio venezolano. Dos de los soldados resultaron gravemente heridos y están siendo trasladados a un hospital para recibir atención médica.
En respuesta a estos acontecimientos, la Cancillería de Venezuela rechazó las acusaciones y calificó el ataque como parte de una "operación de falsa bandera".
En un comunicado emitido a través de Telegram, el Ministerio de Exteriores venezolano argumentó que el gobierno guyanés está promoviendo una "narrativa falsa" para desviar la atención de las violaciones al derecho internacional que comete en la Guayana Esequiba.
Además, indicaron que están investigando el incidente y que los primeros indicios sugieren que los heridos podrían estar vinculados a actividades ilegales mineras en la región.
Este ataque se produce en un contexto de tensiones históricas entre Guyana y Venezuela por la soberanía del Esequibo, un territorio rico en recursos naturales que ambos países reclaman.
Venezuela ha insistido recientemente en su interés estratégico por esta área y ha anunciado planes para elegir una autoridad venezolana en la región durante las elecciones regionales programadas para el 27 de abril.
El jefe del Ejército guyanés, Omar Khan, también confirmó que se está llevando a cabo una evaluación sobre cómo responder a este ataque y proteger a las fuerzas armadas del país. La situación sigue siendo delicada y podría intensificar aún más las tensiones entre ambos países.