Cuba acusó al secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, de mentir sobre la protesta que realiza en La Habana un grupo de jóvenes artistas y reclamó a Washington cesar la "injerencia" en sus asuntos internos.
El Político
"El Secretario Pompeo miente, EEUU nunca ha apoyado al pueblo cubano" y "debe cesar y desistir de la injerencia en los asuntos internos de Cuba", tuiteó el canciller cubano, Bruno Rodríguez.
"Su gobierno se ha empeñado en agredir a nuestro pueblo por todas las vías concebibles", denunció a CNN.
Condena de Pompeo
Pompeo condenó el martes "la cruel represión" del gobierno comunista de la isla contra los integrantes del Movimiento San Isidro que protestan pacíficamente contra el encarcelamiento de uno de sus miembros, el activista y rapero Denis Solís.
Solís fue arrestado el 9 de noviembre y condenado a ocho meses de prisión por "desacato" a la autoridad. Pompeo denunció además esa sentencia como "injusta" y pidió su liberación.
También en Twitter, el jefe del departamento de Estados Unidos en la cancillería cubana, Carlos Fernández de Cossío, destacó que "fomentar y financiar a grupos de individuos en otros países con fines de interferencia política y para instalarlos a generar inestabilidad social" es "una práctica habitual del gobierno de EEUU".
Sin reconocimiento en Cuba
La Habana no reconoce legalmente ningún movimiento opositor y los considera "mercenarios" al servicio de Estados Unidos.
Una docena de miembros del movimiento inició la protesta el 17 de noviembre, y según los activistas, algunos de ellos se mantenían este miércoles en huelga de hambre y sed.
Desde el viernes hubo una fuerte presencia de las fuerzas de seguridad alrededor de la sede del colectivo, impidiéndole el acceso al lugar de la protesta, que recibió el sábado el apoyo de las cuatro principales organizaciones opositoras del país.
Denis Solís
Solís fue condenado a ocho meses de prisión en noviembre por «desacato» por insultar a un policía cubano que, según dijo, ingresó a su casa sin permiso. Solís no era un músico conocido antes de su arresto.
Al menos seis miembros del Movimiento San Isidro, un grupo de disidentes que protestan contra la censura del gobierno, siguen en huelga de hambre mientras exigen la liberación de Solís.
La policía cubana acordonó el edificio donde los disidentes realizan su huelga de hambre y no ha permitido que periodistas o diplomáticos visiten a los manifestantes.