La batalla del Brexit y el Remain por el referendum británico es una guerra entre "blue", el color azul del partido conservador. Nació como una idea del premier David Cameron para frenar a los euroescépticos de su partido Tory y hoy, hasta puede costarle el cargo después de la consulta del jueves.
El hotel Goering, en pleno Westminster, es uno de los mas distinguidos de Londres, donde se alojo la actual duquesa de Cambridge el día de su casamiento. En una mañana de primavera es el lugar donde se encuentran los conservadores más notorios a desayunar, con un servicio de porcelana impecable y mozos a quien conocen por su nombre.El problema en estos días es que unos y otros han perdido la cortesía y no se saludan entre ellos.
Cuando David Davis ,el efervescente diputado conservador y frustrado candidato a primer ministro frente a David Cameron desayunaba con Clarín, enfrente estaba Nicholas Soames, su colega Tory y pro europeo, que lo ignoróÂ durante dos horas. Un test para la acidez de un referéndum , marcado por un tono xenofóbico e intolerante.
David Davis es uno de los lideres del Brexit. Pero como su propia historia diversa, sus argumentos son diferentes. Hijo de madre soltera, una infancia en una casa municipal repleta de inmigrantes de Tooting, padrasto polaco y obrero,militar de las fuerzas especiales británicas del SAS, un Master en Negocios y luego, la universidad de Harvard. Y para generar aun mas confusión ,un defensor acérrimo de las libertades civiles en Gran Bretaña pos guerra Irak, que lo llevaron a renunciar a su banca. Un conservador libertario, ex ministro para Europa durante el gobierno de John Major, ex ministro del interior en las sombras frente a Tony Blair y habilísimo negociador. Probablemente uno de los que se sentaron en Bruselas si gana el Brexit.
Cuando el conoció a Jo Cox, la diputada laborista pro europea asesinada, pensó que "esta diputada inteligente y con agallas, tenia una larga y brillante carrera en la Cámara de los Comunes. Nunca imaginé que su vida brillante podría ser extinguida" dijo. Pero le preocupa que su muerte los diputados llamen a defender las oficinas de sus distritos con la policía ante la amenaza. "Me preocupa que estas llamadas de que se debe hacer", nosotros diluyamos o dañemos lo que es central a nuestra democracia: la accesibilidad a los miembros del Parlamento de los electores. El vínculo con nuestros distritos es fundamental en la operación del Parlamento. El coraje de Jo era un regalo. Mi impresión es que ella no hubiese querido que su trágica muerte sea una razón para debilitar el vinculo entre los diputados y sus electores de ninguna manera" alerto David Davis.
-¿Gana el Brexit o se impone el Remain?.
Si usted me hubiera preguntado hace tres meses cuáles eran las probabilidades, yo habría dicho que era muy, muy posible que ganara el Remain en la Unión Europea. Los números que le habría dado serían 60-40. Sesenta por ciento de votantes a favor de la permanencia, contra un cuarenta por ciento. Es bastante parecido a lo que ocurrió en 1975, cuando al principio dos tercios del público parecían favorecer la salida, y al final el resultado fue dos tercios a favor de la permanencia. La razón, entonces, era que el establishment británico, el gobierno, los empresarios, la Confederación de la Industria Británica [CBI], los sindicatos, todos estaban a favor de quedarse, excepto unos pocos políticos,. Gente que podía ser vista como perteneciente a extremos opuestos del espectro político. Eso no ha ocurrido ahora, por dos o tres razones. En primer lugar, David Cameron no ha manejado bien las cosas. No ha hecho una gran negociación en Europa y ni se ha mostrado ante el público como un muy buen negociador. Hoy estamos cabeza a cabeza.
-¿Usted cree que él perdió la oportunidad de negociar? ¿Es verdad que manejó mal la negociación en Europa? ¿O es que no vendió bien su negociación aquí?
-Creo que la estrategia de negociación no era sólida. Si verdaderamente hubiéramos procurado obtener una reforma completa de la Unión ,tendríamos que haberlo hecho de otra manera. Debíamos de haber tenido primero un referéndum ,que estableciera qué era lo que queríamos. Sabemos que a la Unión le inquieta el referéndum. La Comisión Europea está muy inquieta con el referéndum. Si hubiéramos tenido un referéndum, en el que dijéramos: "Ésta es nuestra lista de compras. Esto es lo que deseamos negociar", podríamos haber conseguido un 70% de apoyo. Y, entonces, la Unión habría estado bajo presión. Y él podría haber dicho en serio: "Yo recomendaré que ustedes se queden, sólo si logramos un trato decente". El hecho es que él fue a ofrecer muy poco. Si hubiera conseguido todo lo que quería, no me habría hecho feliz a mí. Ni a muchos como a mí. Por otro lado, cuando consiguió la mitad de lo que pedía, trató de representar aquello como un gran éxito. La gente comenzó a pensar que él diría: "Quédense, no importa cuál sea el resultado…" Si los europeos le hubieran dicho: "Váyase, no le daremos nada", también habría dicho: "quédense". Cuando hablaba sobre la idea de salir, decía: "Aquél no será el lugar en que querríamos estar." En otras palabras, admitió que para él no había una buena razón para estar fuera de la Unión. De modo que la combinación de haber ido a ofrecer muy poco, y haber pedido mucho, y luego, no haber sido muy transparente acerca de lo que él mismo quería para el futuro del país, ha realmente destruido su credibilidad. No en todo el público, pero sin duda en dos tercios del público.
-¿Qué rol juega la inmigración?.
-Siempre la inmigración ha sido una parte importante del debate europeo. No para todos. No es el más importante para mí, de ningún modo. Pero para una gran porción de la población. En particular, es importante para aquellos a quienes no les va tan bien, que viven en áreas en que el tema de la vivienda es un problema, o el tema del trabajo es un problema. Esas personas sienten el impacto directo que tiene la llegada de inmigrantes de Europa y el exterior.
Y después está Nigel Farage infundiendo miedo en la gente… Y después Farage le da cuerda, por supuesto. Ahora todo el mundo le está dando cuerda. Pero era un tema importante, de todos modos. Yo diría que, probablemente, un tema decisivo para más o menos 6 ó7 millones de persona. Cuatro millones de personas votaron a Farage Cada uno de ellos considera que la inmigración es un tema importante. Más o menos la misma cantidad, insisto, gente del partido conservador o laboristas, se preocupan por la inmigración. Uno podría verlo en la actitud de algunos miembros laboristas del Parlamento, incluso los que votarán la permanencia, dicen que se trata de un tema importante
– ¿El problema es la inmigración o la xenofobia?.
Es sencillo hablar de pobreza y xenofobia aquí, sentados en uno de los hoteles más caros de Londres. La verdad es que si uno tiene dificultades para encontrar una escuela a la que asistan sus hijos, en la que predomine el idioma inglés. Hay clases en las que la mitad de los chicos no habla inglés como lengua materna. O si uno tiene problemas para conseguir un trabajo. O, mucho más importante, tal vez, si los hijos de uno tienen dificultades para conseguir trabajo. Porque se trata de un problema que se relaciona más con una generación mayor, antes que con la generación joven . Sus hijos tienen dificultades para conseguir trabajo. Entonces los chicos están en la casa. Y a usted la lleva en el taxi un conductor serbio, y la lavandería le pertenece a un pakistaní.Uno advierte fácilmente por qué la gente llega a posturas semejantes. No necesitan odiar a los extranjeros para decir: "esto es demasiado". Y usted debe reconocer que en Gran Bretaña, en los últimos veinte años, las clases dominantes, los políticos, han mentido acerca de la inmigración. Mentido, mentido y mentido. Lo que pasó fue que la mayor parte del continente, dijo: "Tendremos un período de transición que durará 7 años". Nosotros no lo tuvimos. No tuvimos un período de transición.
¿Qué pasó? Todos las personas que deseaban un trabajo con un salario decente vinieron acá. Mire, si yo hubiera sido polaco, yo habría venido aquí… Porque nuestro salario mínimo, en ese momento, era dos o tres veces mayor al salario promedio.. Algunos de mis parientes tienen origen polaco. De modo que no los culpo a ellos, sino al gobierno. Porque están haciendo lo que ha hecho mi familia, hace cuatro generaciones. Van de un país un tanto maltrecho, hacia la más exótica capital del mundo. Eso es Londres, es la capital más atractiva del mundo. Disculpe. (Risas) No quiero ser grosero, pero lo es…
-Yo vivo en París…
– Esa es la segunda mejor. (Risas) Desde esta perspectiva, uno puede entender a alguien que es pobre. Por supuesto, una vez que se acomoden, ellos también serán xenófobos, también serán racistas. Pero la mayoría de ellos no lo son. Y no es ahí que se encuentra la discusión.. Ahora, uno le agrega a esto el desastre sirio. Y están entrando miles de refugiados. Por supuesto, el público no distingue entre refugiados, buscadores de asilo, por un lado, e inmigrantes, por otro. No lo distinguen.
-Durante muchos años ustedes hicieron esa distinción. Especialmente en la Segunda Guerra Mundial. ¿Entonces qué pasóÂ ?
-Legalmente, todavía hacemos la distinción. Por supuesto que sí. Pero estoy hablando de política ahora. Hoy, si uno no consigue explicar la cuestión en veinte palabras, ha perdido la discusión. Ése es el problema. Una de las más asombrosas ironías de la vida moderna es que las maravillas de la tecnología moderna han vuelto la vida pública mucho más cruda, mucho más sencilla, porque todo se reduce a Twitter.Si uno no consigue ganar la discusión en 140 caracteres está fuera. Ellos simplemente piensan: "inmigrantes". No dicen por qué, sencillamente piensan "inmigrantes". Y ven gente muriendo, niños muriendo en playas, y asocian todo esto con incompetencia europea. Esto es cierto a medias, hay mucha incompetencia. Es mi punto. De igual manera en materia de seguridad, Siria está en el centro del asunto. De igual manera en materia de seguridad. Trataré de presentarle el argumento según el cual necesitamos a Europa para nuestra propia seguridad. De algún modo, hay un extraordinario intercambio de información.
-¿Europa no tiene intercambio de información con Gran Bretaña y viceversa?.
-Apenas intercambiamos información con los franceses. Somos parte de la Alianza de los Cinco Ojos. Hay una regla que se llama ‘regla de información suministrada por terceros’. Yo hacía estas cosas como ministro. Y la regla es muy sencilla. Si yo le doy información a usted, a usted no se le permite darle información a ella, sin mi explícito consentimiento. Así es la regla. Y las únicas áreas que están excluidas de la regla son las que pertenecen a los Cinco Ojos. Todos hablamos inglés, nos llevamos bastante bien… Entonces intercambian con los australianos, los kiwis, pero no con los franceses.
No inmediatamente con los franceses. Con los franceses sería a toma y daca. Habría un quid por quo. Yo esperaría algo a cambio. A no ser que tenga que ver con un ataque terrorista inminente. Eso sería diferente. Pero no hay una relación hospitalaria, cómoda con la Unión Europea. Para nada.
¿Por qué apoya usted a Brexit?¿Usted no ha encontrado nada positivo en Europa?.
-Le daré mi modesta versión de Europa. En 1972, era apropiado unirnos. Éramos un país en decadencia. Teníamos muy malas perspectivas económicas. La mayor parte de nuestras exportaciones iban al resto del mundo, no a la Unión Europea. Pero hicimos una mala negociación cuando nos unimos. Pudimos haberlo hecho mejor. Pero, durante veinte años, mejoramos. Y nos está yendo mejor que a todos los demás… Esto se debe a un aspecto del Mercado Común del cual la gente no habla actualmente. Porque esto fue antes de la gran liberalización de los aranceles internacionales. Había una gran barrera arancelaría alrededor de Europa. Y con esta barrera arancelaria alrededor nuestro, con esta frazada cálida y agradable, nos estaba yendo muy bien. Hasta más o menos principios de los ’90. Entonces ocurre la Ronda de Uruguay. La Ronda de Uruguay y también el Mercado Único. Eso es nuestra culpa. Nosotros lo ideamos. Somos tontos. El Mercado Único era supuestamente como el Mercado Común, pero mejor. En cambio, lo que ocurrió, es que el Mercado Único se convierte en un mecanismo para burocratizar el comercio.
-Pero la Unión Europea es un proyecto político, no solo económico.
En 1975 la gente votó por un pacto económico, no votó por política. Usted tiene razón, se trata de política. Cada vez que yo iba al gabinete de ministros, nadie tenía ninguna duda que para casi ninguno de ellos se trataba de un proyecto político. El razonamiento es bastante transparente. Alemania e Italia realmente no habían tenido democracias robustas. Francia había tenido una batalla con la democracia. Cada país que se unió, durante un tiempo, había venido de situaciones similares. O bien de la devastación de la Segunda Guerra Mundial, o bien de problemas políticos. España se unió después de Franco, los griegos se unieron después de la Dictadura de los Coroneles, los de Europa Oriental se unieron cuando terminó la opresión soviética. De modo que uno puede ver cómo para cada uno de esos países, Europa era algo maravilloso. Porque para ellos representaba la democracia. Nosotros nos unimos después de haber sido durante doscientos años la más exitosa democracia liberal del mundo moderno. Entonces, ¿por qué tendríamos que sentir que pertenecer a Europa nos beneficia de algún modo? Cada aspecto de este proyecto político nos disminuye. No nos hace crecer. El argumento de que al ser parte de parte de un grupo de veintiocho uno es más poderoso está equivocado. De modo que el proyecto político no nos ayuda. No es que yo eche la culpa a los europeos por desear este proyecto político, porque para ellos, que han sufrido dos Guerras Mundiales en un siglo. Debemos aprender algo de todo esto. Millones y millones de personas murieron. No los culpo. Sencillamente creo que el proyecto en su conjunto es inestable, a largo plazo, en un plazo de treinta o cuarenta años.
-Si uno analiza la postura de Brexit y las otras, no hay una verdadera diferencia. Todas son profundamente antieuropeas.
Divo Gordo
Sólo que los otros piensan que no hay otra alternativa. ¿Por qué los del Brexit no piensan lo mismo?
-No, porque sí hay una alternativa. Hay muchas. Osborne está argumentando que ninguna de las otras opciones nos quedarían bien. Es claro que no. No somos Suiza, no somos Noruega, no somos Canadá. Somos formidablemente poderosos. Lo que suelo decir, livianamente, cuando hablo en conferencias, es: "Salgan ustedes a la calle y cuenten los autos. Verán que de cada cuatro, uno de ellos es un Audi, BMW, Mercedes y VW." Somos el mercado más grande de Alemania, fuera de su propio mercado. Somos su mercado más próspero, que más rápido crece. La opción podría ser, en términos comerciales, la de ir a un comercio mundial. Podemos pedir eso. Eso constituirá una desventaja tremenda para los alemanes. ¿Quién es la persona más poderosa de Europa? La canciller alemana. Ahora es Merkel, pero quien sea canciller alemán será la persona más poderosa de Europa. Los alemanes no pueden permitir que ocurra el colapso que Osborne describe. Por esta razón, creo que eso fortalece nuestra posición. En términos de lidiar con el resto del mundo, en términos comerciales. Es allí que se encuentra, en gran medida, nuestro futuro.. Puedo comprender por qué los europeos podrían sentirse muy enfadados. Será un disgusto que durará seis meses.. No veo ninguna razón por la cual no podamos tener un mejor acuerdo. ¿Por qué está pasando esto? Es por los 28. Es porque hay demasiados allí. A Europa le lleva mucho tiempo llegar a un acuerdo, normalmente. Nosotros tenemos una gran claridad acerca de cuáles son nuestros intereses. Sin duda, en los dos años posteriores a Brexit, la salida, si es que ocurre, pondremos nuestra mayor atención nacional en el asunto. Por esta misma razón he dicho en televisión que Cameron debe encontrar a alguien que lo haga. Tratarán de meterme a mí a la fuerza… (risas) Pero Osborne dijo hoy que el PBI se reduciría un 4% si salen de Europa.
Es un disparate, es una conjetura. Si no puede hacer una predicción cuando estamos en Europa, como podrá hacerla para cuando salgamos de Europa. (Risas) A su vez, el FMI ha dicho que podrá constituir un riesgo a nivel global, si se van… Pero Christine Lagarde es parte del establishment francés. Es claro por qué defiende esa postura.Y los que más enojados están con todo esto son los franceses. Saben que si nosotros nos vamos, Europa quedará disminuida. No hay la menor duda al respecto. Es la pura verdad. Europa quedará significativamente disminuida.
-Pero Inglaterra también. Serán irrelevantes en el mundo. Es lo que dicen todos.
-No.Seguiremos estando en el Consejo de Seguridad de la UN, siendo el miembro líder de la OTAN en Europa, teniendo nuestra relación con Estados Unidos, porque se irá Obama, gracias a Dios. A mí no me gusta Obama.
-¿Por qué?
Para empezar, es un hombre que lo primero que hace cuando entra al Despacho Oval es sacar el busto de Winston Churchill. Odia a los británicos. Cree que los británicos torturaron a su padre. Si es cierto o no, no lo sé. Pero es lo que él cree. No es ventajoso para nosotros, como presidente de los Estados Unidos.
¿Si se van de Europa, cómo negociará el Brexit? Jean Claude Juncker dijo : "con los británicos uno debe negociar siempre tres veces. Así que, los estamos esperando. Negociaremos." ¿El Brexit es una forma de negociar un mejor acuerdo después?
-Sí. Uno empieza diciendo: "Bueno, nuestro punto de referencia, señores…". Debemos tener un punto de partida. O bien elegimos a partir de la circunstancia actual, e, comercio efectivamente libre a través del canal de la Mancha. O podemos empezar por Organización Mundial del Comercio. Porque podemos exigirlo. Y si uno no puede escoger entre alguno de los dos. Entonces uno empieza por ahí. Hay que comprender que durante los primeros seis meses no habrá ningún progreso. Tenga en cuenta que la disposición actual de las cosas quedará en su lugar durante dos años más. Los primeros seis meses no habrá progreso. Habrá mucha histeria. Los franceses estarán como locos. Los españoles también. Los alemanes se rascarán la cabeza, tratando de descubrir cómo pudimos sacar lo mejor de todo esto. Los suecos, los nórdicos serán mayormente amables, mayormente aunque no siempre, no los nuevos nórdicos, los viejos nórdicos serán amables. Y luego vendrá un período de mayor calma. Así lucirán las cosas, más o menos. Dos meses, tres meses, seis meses. No durará mucho más que eso. Hay que hablar con claridad sobre tres sectores completamente diferentes. El sector de servicios, que es la negociación más difícil para nosotros, porque somos los más grandes, y es el área en la que tenemos superávit comercial. El sector de la industria, en sentido amplio, que es una negociación más sencilla… Y la agricultura, en donde podríamos tomar vías completamente distintas. Déjeme tratar el tema de la agricultura.
– ¿Será difícil con los franceses?
-No, no, no. Los franceses quieren vender vino aquí. Tienen un enorme superávit comercial vendiéndonos a nosotros. Nosotros no le vendemos demasiado a ellos. Normalmente soy un partidario agresivo del libre comercio. Pero el hecho es que los cambios en el CIP durante la última década han puesto a los precios en una base más razonable. Lo cual hace más fácil para nosotros optar por el libre comercio, porque quiere decir que nuestros agricultores ya están prácticamente ahí. Todavía tendremos que subsidiarlos, tendremos que mantener algo parecido a la estructura de subsidios que tenemos actualmente con la Unión Europea. Pero en vez de mandarlo para que después vuelva, lo haríamos nosotros. Y hay beneficios en esto. Bueno, pero es una parte pequeña del asunto. Entonces hay dos opciones. Yo me inclinaría por la vía de negociación más sencilla…
-¿Y quién será el negociador? ¿Será Boris, será usted?
Ni idea…Boris no.Boris no se mete en detalles. Boris se olvidará. No aparecerá. "Ay, es martes, tendría que estar en Bruselas…"
-Si ustedes ganan, ¿qué ocurrirá con Cameron? Ken Clarke ha dicho que durará apenas 30 segundos. Usted dice que él debe quedarse, pero que no tendría que negociar. ¿Podría enunciar claramente su posición, por favor?
El tendría que nombrar a alguien en quien el país y el Partido Conservador tengan confianza. ¿Sí? Ahora bien, el problema. Hay una serie de cuestiones. Hay gente a la que no le gusta Cameron… -Como a usted… No, no. No me disgusta Cameron. Es un buen muchacho. Hay más o menos, creo, veinte personas en el partido Tory que no sienten simpatía por él. Yo no estoy entre ellos. Esas personas tratarán de librarse de él como sea. Pero no es un número demasiado importante. Es relativamente pequeño. Después están aquellos que tal vez intentarán sucederlo, los que querrán estar en los equipos de quien lo suceda, los que esperan algún ascenso si.Es el grupo que mira sus propios intereses. Los dos grupos no son muy grandes, no tanto como para hacerle perder el equilibrio. El tercer grupo, es el de los que dirían: "Lo que él ha dicho durante años, que no podremos negociar un acuerdo decente estando fuera de Europa. Él sería la persona menos indicada para llevar a cabo la negociación." Esa es la retórica. Es una descripción hiperbólica. Pero hay cierta verdad allí. Por eso yo he dicho que él tendría que nombrar a alguien para hacer el trabajo. Michael Gove..
. ¿Michael Gove, uno de los líderes del Brexit y actual secretario de justicia del gobierno?
Gove es una posibilidad. Pero no sería una persona, de todos modos. Sería un equipo.
¿Theresa May?
No, ni en un millón de años. Theresa May es una capacitada Secretaria de Interior. Pero no creo que sea recordada como una de las mejores Secretarias del Interior de los tiempos modernos. No será un Roy Jenkins. Pero esto requerirá una energía y un grado de compresión intelectual de otro orden. Porque será complicado. No será una persona. Habrá que crear un equipo de gente que crea en el proyecto. Y básicamente darles libertad de acción. Se puede hacer.
-¿En esta campaña del Brexit no hay cierta hipocresía? Porque al final Boris Johnson está en dos campañas, la de Brexit y la propia campaña electoral para suceder a Cameron.
-Boris está en una campaña. ¡Siempre es la de Boris!.Boris es Boris. (Carcajadas).
-¿Y Brexit es un movimiento transversal? ¿Usted cree que el laborismo votará por Brexit? ¿Votarán por ustedes?
-Si hacemos un trabajo competente, sí. Algunos lo harán. No me gustaría nada que se fuera Corbyn. Creo que Jeremy Corbyn es mejor. Demostrará ser un oponente más fuerte de lo que piensan algunos de mis colegas. Yo creo que le ganaremos, pero él no es tan malo como ellos dicen. Porque ellos lo están viendo desde el punto de vista metropolitano, una mirada desde adentro de Londres, no desde afuera de Londres.
-¿ Y cómo será el trabajo parlamentario después del Brexit?.
– Uno de los efectos de Brexit será que durante los próximos cuatro años el Parlamento estará enfocado en manejar el asunto de manera adecuada. Sería un proyecto bastante grande. No es sencillamente un proyecto, la renegociación con los europeos. Es un proyecto sobre el establecimiento de nuestras relaciones con el resto del mundo Nos disponemos de manera activa y agresiva para hacer de Gran Bretaña una economía de mercado mucho más fuerte. Ha sido nuestra historia, y se nos ha escapado. No sólo a causa de la Unión Europea, sino también a causa de la decadencia económica de la posguerra. Cuando el Imperio se convirtió en el Commonwealth nosotros sencillamente asumimos que todo sería igual, pero no fue así.
– Entonces se están recuperando luego del Imperio.
-Sí, hay algo de eso. Hay algo de eso.
– El concepto es ése.
-Hay algo de eso… Margaret Thatcher… Una vez, yo estaba en Phoenix, Arizona. Y vi que Margaret Thatcher hablaría en la ciudad, en la cámara de comercio local. Entonces me invitaron. Su primer comentario fue a todos los estadounidenses que estaban allí: "Vengo de un país en el que se produce más historia de la que se puede consumir localmente" .(Risas). Me pareció una frase brillante. Así somos. Producimos más historia… Debemos lidiar con nuestra historia. Pero el punto es que, en un escenario post Brexit, para Gran Bretaña… No afecta sólo las negociaciones, afecta todo tipo de cosas, afecta nuestras regulaciones, afecta nuestros niveles impositivos, afecta el modo en que promovemos el comercio, afecta nuestras actitudes diplomáticas, también, en el mundo. Tendremos grandes ventajas. Yo bromeo acerca del idioma inglés, pero es una gran ventaja para nosotros.. Si tenemos éxito y Brexit funciona, creo que ganaremos las siguientes elecciones fácilmente. No se trata, principalmente, de Jeremy Corbyn. Se trata de cómo nos comportaremos nosotros.
-¿Cómo cree usted que Brexit afectará a Europa? ¿Destruirá a Europa, de algún modo?
Depende de cómo se comporten ellos mismos. Insisto, no hay un único resultado posible. Hay una serie de cuestiones que están causando grandes problemas. La libre circulación de personas, el euro, algunos aspectos de la burocracia: sobre todas estas cuestiones ellos fueron advertidos..El problema migratorio, es inmanejable dentro de Europa. No se puede manejar en este momento, a causa de las amenazas externas. A causa de Siria e Irak. Mis propuestas para lidiar con el tema migratorio a largo plazo (que serían revertir algunos de los elementos de Schengen, para devolverle cierto margen de acción a los Estados para controlar, cuando hay un problema) no podrán ser efectivas con un problema migratorio de esta escala. Por eso fui a Siria. Por esta razón fui a Siria. Debía ser Cameron, no yo. Pero Cameron está atrapado en la perspectiva estadounidense de Siria. Que es una locura. Por eso no creo que sea bueno Obama. Es un tonto. La lectura estadounidense de Medio Oriente es un desastre. Dentro de un siglo será visto como el fracaso más grande de Occidente. Porque no entendieron Irak, no entendieron Siria. La única respuesta al problema Europeo, y el problema de la migración de masas, es resolver la fuente de sus problemas. No hay una respuesta europea para esto.
. -El concepto de ayuda humanitaria ha desaparecido. ¿Usted qué piensa que deben hacer?
-A menos que ellos no encuentren una solución relativamente rápida para Siria, no habrá solución. Eso es lo primero que debemos entender. Es imposible de resolver. En segundo lugar, lo que está ocurriendo es que de Siria salen la mitad de los refugiados. No todos. Hay afganos, paquistaníes, iraquíes. Y está demostrado que es muy difícil, para un guardia de frontera no muy bien educado, que custodia la frontera entre Bulgaria y Turquía, o lo que fuere, tener la capacidad de distinguir cuál es cual. Y cuando vienen de a miles, no hay nada que hacer. Podríamos poner un cerco, y un campo minado a lo largo de toda la frontera. Pero es algo terrible, verdaderamente terrible para una civilización moderna. ¿No es cierto?
– Tenemos el resultado de lo que hicimos. ¿No?
-Sí… Hay un dicho. En un negocio de porcelana inglesa, o un negocio de vajilla, si usted lo rompe, es suyo. (Risas). Resulta que hemos roto la mitad del mundo. Hemos roto la mitad del mundo y nos pertenece. Entonces tenemos que empezar por arreglarlo
– ¿Qué harán con los europeos que viven aquí, y con los británicos que viven en Europa?
Están todos protegidos por los protocolos de Viena, por la convención de Viena. Hablando en términos amplios, se quedan.
-¿De verdad?
-Sí, se quedan. Es muy transparente. Si, creo que es la convención de Viena, o el protocolo de Viena sobre residencia en el extranjero. Si la cosa se pusiera fea, creo que se nos podría complicar la existencia con impuestos locales y alguna otra cosa. Pero no lo creo. Hay más extranjeros viviendo aquí de los que ellos tienen allí. Y mi argumento en estos temas es siempre el mismo. Siempre hay que estar del lado más civilizado de la discusión. Si uno es el lado más civilizado de la discusión, terminará ganando. Nuestra actitud hacia las personas que ya están aquí es: "el hecho de que usted esté aquí, no es culpa suya".. En todo caso, es nuestra culpa por crear las circunstancias políticas que tuvieron ese resultado.. Usted es un bienvenido ciudadano potencial de Gran Bretaña.
Divo Gordo
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Con Información de: El Clarín