El ministro de Justicia de Argentina, Germán Garavano, aseguró que el Gobierno que integra "lejos está" de "impulsar una persecución" contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien en repetidas ocasiones ha asegurado estar sufriendo un hostigamiento político, mediático y judicial.
"Lejos está el Gobierno de fomentar o impulsar una persecución contra nadie. No es el estilo de este Gobierno. Al contrario. En esto nosotros siempre hemos pedido mucha prudencia y cautela", afirmó el ministro en declaraciones a radio FutuRock.
Fernández, afectada por varias causas judiciales, acudirá hoy a los tribunales para ser notificada de la decisión de un juez de procesarla en el marco de una causa por presuntas operaciones irregulares en el Banco Central durante el último tramo de su Gobierno.
Principalmente a través de las redes sociales, la expresidenta, quien gobernó entre 2007 y 2015, criticó en los últimos tiempos que hace "décadas" que no se veía "un abuso de poder y persecución política" como los que denuncia se están produciendo contra ella y remarcó que hay un "claro objetivo" de meterla "presa".
Garavano rechazó hoy esa supuesta situación y aclaró que "la mayoría de los jueces" se desempeñaron ya durante toda la gestión kirchnerista, e incluso algunos "fueron designados por la expresidenta".
El titular de Justicia confesó que él mismo ha recibido "ataques muy interesantes" porque también hay personas que consideran que él "está tratando de frenar los procesos judiciales".
"La realidad es que el Gobierno no incide ni a favor ni en contra", subrayó Garavano, quien rechazó drásticamente que el Ejecutivo trate de incidir sobre los jueces.
En cuanto a la rapidez con la que se están desarrollando en los últimos meses causas judiciales que afectan a diferentes altos cargos durante el kirchnerismo, el funcionario consideró que "se ha dado una mezcla de cuestiones".
"Por un lado una demanda fuerte de la opinión publica asociado a algunos hechos que fueron muy notorios, que fueron si se quiere muy groseros vinculados a videos, detenciones y situaciones que generaron una reacción en la propia gente", indicó.
Por otro lado, agregó que "puede haber también algunos jueces" que hayan sentido una "no existencia de presiones para frenar o interferir en su labor" desde que en diciembre de 2015 asumió la Presidencia Mauricio Macri.
"Y habrá algunos otros que también querrán avanzar por su propia supervivencia si se quiere, lo cual sería muy malo si esto es así", señaló.
"No por lo que hicieron sino por lo que no hicieron antes", matizó Garavano, quien opinó que "habrá que preguntarle a los integrantes del Gobierno anterior cómo construyeron esta Justicia que dice que los persigue".
El ministro dijo que Argentina es un país "con altísimos niveles de impunidad en todos los niveles" y que por ello hay una demanda de la población "muy fuerte sobre el sistema judicial".
"Porque muchas cosas que se podrían haber resuelto hace muchos años a favor o en contra con absoluciones o condenas, según corresponda, no se hizo", concluyó.
EFE