La Alianza kurdo-árabe Fuerzas de Siria Democrática (FSD) dio el pistoletazo de salida a la ofensiva para liberar la ciudad de Al Raqa, en cuya primera fase tratará de aislar el feudo sirio del grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Coincidiendo con las operaciones para tomar Mosul, la "capital" de los extremistas en el vecino Irak, esta alianza apoyada por Estados Unidos reveló que se embarca en una "amplia campaña militar" para derrotar al EI.
La comandancia general de las FSD publicó un comunicado en su página oficial de Facebook, así como un vídeo en el que una de sus combatientes lee el texto, antes de que desde Washington se anunciara cualquier operación.
Horas después, el secretario de Defensa, Ashton Carter, celebró el inicio a la ofensiva, aunque advirtió de que "como en el caso de Mosul, la lucha no será fácil".
"Los esfuerzos para aislar y, en última instancia, liberar Al Raqa marcan el siguiente paso en los planes de la campaña de la coalición", explicó Carter en un comunicado, en el que garantizó que EEUU hará "lo necesario" para facilitar los avances de sus aliados, tanto en Siria como en Irak.
En la ofensiva, denominada "La Ira del Éufrates", participan las FSD -formadas por árabes, kurdos y turcomanos- en coordinación con las Unidades de Protección del Pueblo (YPG, en sus siglas en kurdo), las Unidades de Protección de la Mujer (YPJ) y la alianza internacional encabezada por EEUU.
"Las operaciones de ‘La Ira del Éufrates’ avanzarán con firmeza y determinación hasta lograr su fin, que es aislar y luego hacer caer la capital del terrorismo mundial", subrayó la comandancia de las FSD en su nota.
La alianza kurdo-árabe solicitó el apoyo de las fuerzas internacionales y pidió a las organizaciones humanitarias que se preparen para auxiliar a los habitantes de Al Raqa.
También instó a los habitantes a que se mantengan alejados de las posiciones de concentración del EI, ya que serán objeto del fuego de las FSD y de la coalición internacional.
Dirigiéndose asimismo a los civiles, los invitó a unirse a "las filas de las fuerzas libertadoras", compuestas a día de hoy por unos 30.000 combatientes.
Tras el arranque de la ofensiva se registraron choques entre las milicias rebeldes y los yihadistas en los alrededores de las poblaciones de Laqta y Al Haisha, ambas situadas al norte de Al Raqa, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Los combates en estas localidades se desarrollaron en paralelo a ataques de la aviación de la coalición internacional contra posiciones yihadistas.
Según el Observatorio, un total de seis localidades y posiciones del EI en la periferia septentrional de Al Raqa fueron liberadas en esta jornada.
Por su parte, el EI hizo explotar al menos dos coches bomba contra combatientes de las fuerzas kurdo-árabes en la zona de Saluk, lo que causó 14 bajas en las filas de las FSD, de acuerdo a un comunicado de los yihadistas.
Temiendo por la población, el Observatorio pidió hoy a la coalición internacional que no bombardeé a los civiles "bajo ningún pretexto" en Al Raqa.
En una nota, recordó que hay al menos 655 civiles entre los 6.318 muertos por bombardeos de la coalición desde el inicio de su intervención en Siria el 23 de septiembre de 2014.
El inicio de la operación de Al Raqa se produce después de que el pasado 26 de octubre el secretario de Defensa de EEUU manifestara que esto ocurriría "en pocas semanas" y que el plan siempre fue que esta ofensiva siguiera pronto a la de Mosul.
También en esa fecha, el comandante de la misión militar estadounidense contra el EI, el teniente general Stephen Townsend, especificó que el peso de la batalla lo llevarán los efectivos kurdosirios de las FSD, quienes tomarán las decisiones sobre el terreno.
No obstante, el liderazgo kurdo era rechazado por Turquía, que es miembro de la coalición internacional pero se enfrenta a las FSD en el norte de Siria mediante grupos rebeldes sirios aliados.
El principal componente de las FSD es la milicia kurdosiria YPG, a la que Turquía considera organización terrorista y una simple extensión del turco y proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
El portavoz de las FSD, Talal Salu, aseguró hace ya tres días que la participación de Turquía en la liberación de Al Raqa era "una línea roja" y que había un acuerdo al respecto con EEUU y la coalición internacional.
Para abordar esta situación y la cooperación en la lucha antiterrorista, el jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, Joseph Dunford, se reunió hoy en Ankara con su homólogo turco, Hulusi Akar.
Con información de EFE