La fiscal general republicana de Florida, Ashley Moody, ha emprendido acciones legales contra Starbucks, solicitando una investigación exhaustiva sobre las prácticas de diversidad, equidad e inclusión de la cadena de café.
El Político
Moody, junto con el gobernador Ron DeSantis, anunció la denuncia durante una aparición en "The Sean Hannity Show", expresando su preocupación por lo que perciben como posibles violaciones de las leyes antidiscriminación del estado.
Moody explicó en el programa de radio: "Vamos a asegurarnos de que en Florida esta cuota o contratación y programas que hacen que cada empleado determine si él es el problema en función del color de su piel, si eso viola las leyes antidiscriminación de Florida, por lo que el asunto será investigado".
La denuncia se basa en la meta de Starbucks de tener el 30% de los puestos corporativos y el 40% de los puestos minoristas y de fabricación ocupados por personas de color para 2025, lo que, según Moody, podría infringir las leyes federales y estatales de derechos civiles.
Abren caso en contra de Starbucks en Florida
El caso cobra relevancia en medio de un contexto legal complejo. En marzo, un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones del Undécimo Circuito de EE. UU. dictaminó que la Ley Stop Woke de 2023 era inconstitucional cuando se aplicaba a empresas, esta ley tenía como objetivo evitar que las empresas obligaran a los empleados a asistir a capacitaciones en diversidad, equidad e inclusión (DEI). DeSantis expresó su desacuerdo con el fallo judicial, afirmando que la ley tenía como objetivo permitir a los empleados optar por no participar en dichas capacitaciones.
En su denuncia de cuatro páginas, Moody también destacó los vínculos entre los objetivos de diversidad de Starbucks y las bonificaciones de los ejecutivos, sugiriendo que la empresa tiene cuotas raciales. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la Comisión de Relaciones Humanas de Florida, a la que se ha referido Moody para llevar a cabo la investigación, se describe a sí misma como un "investigador imparcial" que ofrece oportunidades de mediación, y no representa a ninguna de las partes involucradas.
Hasta el momento, Starbucks no ha emitido comentarios sobre el caso. Esta disputa plantea importantes cuestiones legales y sociales sobre las políticas de diversidad en el lugar de trabajo y el alcance de las leyes antidiscriminación en Florida y en todo Estados Unidos.