Los documentos clasificados sólo deben verse en un lugar seguro y no en residencias o sitios particulares. De esta manera, el Departamento de Justicia rechaza la solicitud del expresidente Donald Trump y sus abogados para revisar los documentos en su club privado Mar-a-Lago o Bedminster.
Fue precisamente en Mar-a-Lago donde se señala que Trump retuvo información clasificada y que, posteriormente, pidió a un trabajador borrar las imágenes de la cámara de video de la residencia en la que podría haber evidencias para la investigación que lleva el fiscal especial Jack Smith.
Según nota publicada en Cbsnews, los fiscales federales presentaron una nueva moción para una orden de protección en la que instan al juez que permita a Trump y sus abogados ver los documentos solo en una instalación segura, conocida como SCIF.
El documento entregado por los fiscales, señala:
"Las residencias y oficinas personales del acusado Trump no son lugares legales para la discusión de información clasificada, como tampoco lo serían para cualquier ciudadano privado".
El equipo legal de Trump se opone a la petición de los fiscales. Considera que es una limitación para el trabajo con su cliente. Requeriría el acceso a la revisión de los documentos para definir la estrategia de defensa.
Los nuevos cargos presentados contra Trump este jueves son: alterar, destruir, mutilar u ocultar un objeto; alterar, destruir, mutilar u ocultar corruptamente un documento, registro u otro objeto; retención intencional de información de defensa nacional.