A pesar del impacto positivo de las medidas tomadas por la Reserva Federal (Fed), que han incidido en el incremento de las tasas de interés, el panorama económico estadounidense continúa complicado.
El Político
Cierto que la inflación en el país norteamericano ha disminuido, lo que es un punto a favor del presidente de la Fed, Jerome Power, pero, y como él mismo lo ha anunciado, otras alzas vienen en camino.
La inflación bajo de 9.1% interanual en junio a 8.5% en julio, dos décimas menos de lo esperado. Pero también el desempleo subió dos décimas de puntos de 3.5% a 3.7%.
Que son números insignificantes, es muy cierto. Pero pareciera ser una tendencia que continuará en los próximos meses.
Todo esto es producto de una contracción de la economía de un 0.9% en el segundo trimestre del 2022.
La inflación de EEUU baja más de lo esperado, al 8,5%, y da una bocanada de aire a las Bolsas .
Las expectativas de que la subida de precios haya tocado techo toma forma con el dato del IPC de EEUU.
Una guerra que se prolonga
En fin, la crisis mundial se puede tensar en los próximos meses si Rusia, como anunció hace unos días, corta todos los suministros de petróleo y gas natural hacia Europa.
Vendrán nuevas represalias de occidente y la guerra con Ucrania se intensificará.
La OPEP+ anunció un nuevo recorte de 100.000 barriles diarios en el suministro de petróleo y eso agravará la situación.
Pretenden frenar la caída del precio por las perspectivas de una recesión mundial que aun ronda en el ambiente ante políticas monetarias que buscan frenar la inflación y enfriar el crecimiento.