El subjefe de seguridad del presidente Gustavo Petro, el coronel de la Policía Óscar Darío Dávila Torres, murió de un disparo en extrañas circunstancias. Aunque la versión oficial indica que fue un suicidio, surgieron todo tipo de hipótesis. Dávila había sido citado por el episodio de las escuchas ilegales a las domésticas de Laura Sarabia, exjefa del gabinete presidencial de Colombia.
El Político
El nombre del coronel Dávila había sido mencionado por fuentes de la Fiscalía como posible objetivo de investigación. El interés en Dávila derivaba del llamado "Niñeragate", el caso de las chuzadas ilegales a la niñera Marelbys Meza y a otra empleada doméstica de Laura Sarabia quien, hasta hace unos días era figura de confianza de Petro.
Este viernes, el cuerpo sin vida de Dávila apareció en su carro, estacionado a pocas cuadras de su lugar de residencia en el barrio Nicolás de Federmán, en la localidad de Teusaquillo.
La información oficial señala que el coronel Óscar Dávila se movilizaba con su escolta y estacionó en la calle 22 Bis # 48-40, en el sector de Teusaquillo. Le dijo a su hombre de seguridad que le comprara una botella de agua y, cuando el uniformado regresó, lo encontró muerto con un disparo.
Agentes del Cuerpo Técnico Investigativo (CTI) de la Fiscalía se hicieron cargo del levantamiento del cadáver y las experticias del vehículo.
Colombia: Detalles de la extraña muerte por «suicidio» del policía, que había solicitado a la Fiscalía dar su versión en el caso del polígrafo y las chuzadas a la exniñera de Laura Sarabia https://t.co/utxSLlZ8DM
— AlbertoRodNews (@AlbertoRodNews) June 10, 2023
Hubo una inspección
El pasado miércoles, el coronel de la Policía, Óscar Dávila, atendió a los agentes del CTI de la Fiscalía General que inspeccionaron sus oficinas. Los efectivos realizaron experticias en el lugar de trabajo del funcionario, en la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, en pleno centro de Bogotá.
El coronel Dávila, antes de llegar a la Presidencia de la República como subjefe de seguridad fue jefe del departamento de Investigación Criminal de Cundinamarca y de la Policía Metropolitana de Bucaramanga. Por esa razón, según Cambio, los investigadores de la Fiscalía pensaban que podía estar relacionado con las escuchas ilegales, ya que partieron de investigadores judiciales de la Dijin de la Policía Nacional.
#Atención A pocos metros del búnker de la Fiscalía encuentran sin vida a policía mencionado en caso del poligrafo de Marelbys Meza, exempleada de Laura Sarabia. pic.twitter.com/s6oxymhyXz
— Noticentro 1 CM& (@CMILANOTICIA) June 10, 2023
Quería hablar, pero no pudo
En una carta enviada el 2 de junio al fiscal general Francisco Barbosa, el coronel Dávila dijo que quería rendir una entrevista. Deseaba aclarar los hechos relacionados con el "Niñeragate" que no sólo trata de escuchas telefónicas ilegales que involucraban a funcionarios de la Presidencia. También está el polígrafo al que habrían sometido a Marelbys Meza, exniñera de Laura Sarabia.
En días pasados, el coronel había sido notificado para que declarara ante la Procuraduría General en el marco de las interceptaciones ilegales a la línea telefónica de Meza. La investigación preliminar quería determinar cómo fue que el número de la exniñera apareció en una investigación contra uno de los jefes del Clan del Golfo, apodado "Siopas".
Un plan bien orquestado
Según publicó Semana, Dávila, antes de ser parte del equipo de seguridad del presidente Petro, y mano derecha del jefe de Casa Militar, era el jefe de las Comisiones Investigativas contra el Crimen Organizado (Cicor).
El Cicor tiene diferentes núcleos de trabajo. Uno de ellos abarca Medellín y Urabá, donde opera el Clan del Golfo y era la zona de influencia de "Siopas". Fue justamente a esa unidad del Cicor a la que le ordenaron interceptar las comunicaciones de Marelbys Meza y de Fabiola.
El argumento usado fue que una fuente de altísima credibilidad había manifestado que las dos mujeres eran cercanas a "Siopas". Pero en realidad las espiaban por ser las domésticas de la funcionaria de confianza de Petro, según la investigación de Semana. El uso del polígrafo al que sometieron a Meza también fue justificado por el supuesto vínculo con el Clan, que no era cierto.
“Esto se produce el mismo día en que Laura Sarabia presenta la denuncia. Aquí tenemos la línea de tiempo: el 30 de enero se asignó la noticia criminal en Bogotá, ese mismo día se inventan un informe de policía judicial para interceptar ilegalmente en una investigación del Clan del Golfo cuyo único propósito era escuchar a la empleada que le ayudaba de por días a Laura Sarabia y a la niñera”, contó el fiscal Francisco Barbosa, en su momento. Eso resume Semana en su investigación.
Petro afirma que fue un suicidio
Este sábado después del mediodía, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, afirmó que nadie le dio muerte a Dávila y que él lo hizo por su propia mano. Lo publicó en su cuenta oficial en Twitter, donde suele compartir información sobre hechos relevantes y que movilizan a la opinión pública.
Desmintió las informaciones que circularon acerca de los dos disparos que presentaría el cuerpo y que, de ser ciertas, echaban por tierra la teoría del suicidio. No obstante, Petro insistió en que esa tesis era falsa.
El teniente coronel de la policía, Oscar Dávila, adscrito a la seguridad de la presidencia se la República ha muerto por suicidio.
Cerca a su casa mandó a su conductor por una botella de agua, éste dejo su pistola en el asiento y cuando regresó delante de él se suicidó con un… pic.twitter.com/FME8CxgeE1
— Gustavo Petro (@petrogustavo) June 10, 2023
Lo que mueve a suspicacia
Era tan importante la información que tenía el coronel Dávila que él mismo había enviado una carta a la Fiscalía General. A su vez la Fiscalía lo citó para informar en detalle lo que ocurrió con las nuevas escuchas y las órdenes que se dieron para buscar el dinero que supuestamente se le perdió a Laura Sarabia, entonces jefa gabinete.
Este viernes, antes del a muerte de Dávila, uno de los patrulleros investigados se negó a declarar ante la Fiscalía General. En el acta quedó asentado que "no contaba con las garantías".
El patrullero indicó que en la sala había “personal sin identificar” y que una funcionaria estuvo “conversando por celular con gente afuera”. Por esto pidió reprogramar la diligencia.
Fuente: Semana