El exprisionero de Guantánamo Jihad Ahmad Diyab, acogido como refugiado en Uruguay desde 2014, "insiste en que no se quiere quedar" en el país, dijo hoy a la prensa el enlace del Gobierno con el expresidiario, Christian Mirza.
"Él me insiste en que no se quiere quedar en Uruguay y nosotros le hicimos algunas propuestas que, bueno, estamos en conversaciones. No se siente cómodo, no ha podido adaptarse como lo han hecho los otros cinco refugiados de Guantánamo, esa es la verdad", expresó Mirza.
Diyab abandonó el país a mediados de junio y a fines de julio se presentó en el Consulado uruguayo en Caracas donde pidió ser trasladado a un tercer país distinto a Uruguay para reunirse con su familia, a su salida de dicha sede diplomática fue detenido por las autoridades venezolanas y deportado a Uruguay semanas después.
En la madrugada del pasado martes regresó a Uruguay, donde fue recibido por funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Esta semana Mirza informó a Efe que se estaba "buscando una solución" para tratar de convencerlo y persuadirle para que se quede en Uruguay y traer a su familia al país.
En cuanto a su estado de salud y la huelga de hambre que, según informaciones de prensa, mantuvo el sirio en Venezuela, el mediador uruguayo declaró que "su estado actual es bueno".
"Las decisiones respecto a qué irá haciendo, si hará o no una huelga de hambre, es lo que estamos conversando", señaló Mirza.
En total, cuatro sirios, un tunecino y un palestino fueron acogidos en Uruguay en diciembre de 2014 como parte del compromiso del entonces presidente, José Mujica (2010-2015), de colaborar con su par estadounidense, Barack Obama, en el plan de cierre del penal de Guantánamo (Cuba).
Con información de EFE