Uno de los talones de Aquiles de Estados Unidos podría encontrar una solución en el corto plazo de la mano de Joe Biden y una de las inversiones más grandes en los últimos cincuenta años de historia del país.
El Político
Un plan con más de 2.700 páginas y un presupuesto que alcanza los US$ 1,2 billones fue aprobado la semana pasada en el Senado de Estados Unidos.
Con 69 votos a favor (19 de ellos republicanos, incluyendo al líder de la minoría del Partido Republicano, Mitch McConnell) y 30 en contra, el plan de inversión en infraestructura de Joe Biden superó una gran prueba en un Senado polarizado, reportó El Economista.
Plan de infraestructura de Biden
Ahora es el turno de la votación en la Cámara de Representantes, en donde el Partido Demócrata domina con claridad.
Más allá de algunas discrepancias en el seno del mismo partido, todo parece indicar que para el mes de octubre las negociaciones deberían concluir en la segunda instancia de definición para la aprobación del proyecto.
El problema que busca solucionar Biden dentro de su país no posee un solo responsable, sino que radica en la falta de inversión desde hace décadas.
El estado en el que se encuentran muchas de las carreteras, aeropuertos y tuberías de agua potable se encuentran en condiciones deplorables para un país como Estados Unidos.
Plan de infraestructura
La Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles estableció en 2021 que 43% de las carreteras se encuentran en condiciones mediocres o malas; y más de 46.000 puentes defectuosos con reparaciones que requerirán muchos años en realizarse.
Uno de cada cinco vehículos de transporte se encuentran en condiciones poco aceptables; como así también túneles y aeropuertos a lo largo de todo el país.
Una de las razones de las deficiencias estructurales es que jamás se realizó una inversión; de tal magnitud en las administraciones anteriores, y es un problema de arrastre.
Las famosas carreteras interestatales que logran conectar todo el país fueron construidas en la época del presidente Dwight Eisenhower en los ‘50.
Vital para Biden
El éxito o fracaso del plan de infraestructura será vital para la presidencia de Biden en su primer año de gobierno; dadas las innumerables críticas recibidas por la retirada de las tropas estadounidenses en Afganistán.
Más allá de contar con futuros planes de inversión pública, este, en particular, conlleva el aval de muchos miembros del Partido Republicano; lo que indica la imperiosa necesidad del país del norte en solventar una extensa deuda pendiente.
El gasto total inicial del proyecto era de unos US$ 2,2 billones, pero luego de intensas negociaciones el número se redujo a US$ 1,2 billones; a través del acuerdo bipartidario: será financiado mediante fondos no utilizados del beneficio de desempleo; del paquete de alivio económico y con la venta de reservas de petróleo.