La Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex) pidió hoy a Interpol que no procese las órdenes de captura de exiliados "inocentes" a los que el régimen de Nicolás Maduro ha acusado de estar implicados en el robo de armas de una unidad blindada en Venezuela.
En un comunicado divulgado en Miami, donde tiene su sede, Veppex rechazó "categóricamente" estas acusaciones y aseguró que se trata de la "práctica habitual" del régimen venezolano de "generar acusaciones falsas para poder sostener las mentiras" de su presidente, Nicolás Maduro.
El Gobierno venezolano ha librado "órdenes de captura internacional" contra nueve personas "por estar involucrados en actos que atentan contra la estabilidad y la paz la patria".
Entre esas personas se encuentran la periodista venezolana exiliada Patricia Poleo y el general retirado Marcos Ferreira Torres, a quienes vincula el robo de armas de la 41 Brigada Blindada el pasado 6 de agosto.
Órdenes de captura que, afirmó Veppex, tienen la única finalidad de "mantener la mentira de que la operación habría sido financiada desde Estados Unidos".
"Denunciaremos a las autoridades norteamericanas el peligro latente que existe de que el narco-régimen de Maduro realice operaciones de espionaje y de secuestro de figuras del exilio para llevarlas a Venezuela, torturarlas, encarcelarlas y mostrarlo como un trofeo de la revolución", señaló.
Veppex instó a Interpol a que "no procese estas órdenes de captura internacionales que generan un código rojo contra personas inocentes", ya que, de hacerlo, "se convertirían en un instrumento de persecución de un estado fallido como el venezolano".
Asimismo, la organización de exiliados venezolanos pidió a estos que extremen las medidas de seguridad ante el "peligro de ser secuestrados o sufrir daños" a manos de un régimen que se halla en la "etapa más hostil y sanguinaria".
Con información de EFE