El presidente de Bolivia, Evo Morales, sostuvo hoy que Chile practica una política de "economicidio" con su país al haberle quitado su acceso soberano al océano Pacífico e imponer trabas a su comercio exterior, que se realiza mayormente a través de los puertos del norte chileno.
El mandatario hizo esta afirmación durante la presentación de un estudio de la ONG Oxfam titulado "Bolivia: un país privado de litoral. Apuntes para un debate pendiente".
Morales aseguró que "es una política de economicidio de Chile" el hecho de privar a Bolivia de su salida al Pacífico e imponer "impuestos en los puertos", además de los conflictos sociales en el país vecino, como las huelgas de funcionarios que tienen repercusiones negativas en el comercio exterior boliviano.
"Entiendo que economicidio es como genocidio y el genocidio es delito de lesa humanidad", manifestó.
El gobernante también señaló que le sorprendió saber que el 46 % de los paros portuarios en América Latina se concentran en Chile, según información de la Cepal citada en el estudio de Oxfam.
A su juicio, "eso es por la injusticia y la desigualdad".
Aseguró estar "convencido" de que "en Chile el voto del pueblo chileno es en vano", porque, según dijo, "ahí no gobierna ni la derecha ni la supuesta izquierda, ahí gobiernan las elites".
"Entonces cómo podemos resolver los conflictos sociales si hay problemas serios en la parte económica, las desigualdades económicas y sociales en un país hermano como Chile", cuestionó Morales.
También opinó que la economía del "pueblo chileno" está dominada por "unas cuantas familias".
Precisamente uno de los aspectos que abordó el estudio de Oxfam tiene que ver con las elites de Chile y la privatización de los puertos en ese país.
Uno de los investigadores que coordinó la investigación, Daniel Agramont, explicó que "si bien existen varios problemas que experimenta la carga boliviana con instituciones estatales" chilenas, "la mayor traba" está en los puertos.
Según Agramont, desde que las terminales fueron privatizadas, "las condiciones han empeorado" para la carga boliviana.
El estudio apunta a tres de los grupos empresariales chilenos "que mayor poder han acumulado en las últimas décadas", los Luksic, Urenda y Von Appen, presentes en la administración de los tres puertos más importantes para el comercio exterior boliviano, Arica, Iquique y Antofagasta.
En la guerra del Pacífico, librada a fines del siglo XIX, Bolivia perdió 400 kilómetros de costa y 120.000 kilómetros cuadrados de territorio ante tropas chilenas.
El Gobierno de Morales mantiene desde 2013 en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya una demanda contra Chile para lograr un fallo que obligue a ese país a negociar su centenaria reclamación marítima.
A falta de esa salida al mar, las terminales marítimas chilenas son la principal vía de acceso al Pacífico de Bolivia, si bien el Gobierno boliviano ha denunciado varias veces que sus empresarios y transportistas se enfrentan a malos tratos y a una serie de trabas burocráticas para acceder a los puertos del país austral.
El estudio de Oxfam muestra que aunque Bolivia limita con cinco países, "el más importante para conectarse con el mundo es Chile", indicó Agramont.
"Promediando exportaciones e importaciones, sacamos que en un 82 % dependemos de ese territorio, ya sea por puertos que están en Arica, Iquique o Antofagasta", señaló.
El informe ratificó las trabas señaladas por las autoridades y transportistas bolivianos e hizo diversas recomendaciones al Ejecutivo, entre ellas, la diversificación de las "opciones portuarias" para el comercio exterior del país y mejorar la conexión del país con el mundo.
Con información de: EFE