España volverá a ser esta campaña oleícola 2016/2017 el depósito mundial de aceite de oliva al ofertar más de la mitad de la producción del conjunto de los países productores, que se calcula en torno a los 2,5 millones de toneladas, según apuntan fuentes del sector.
Redacción El Político
España, con algo menos de 1,3 millones de toneladas de aceite de oliva (1.270.000 hasta finales de marzo), abastecerá gran parte de la demanda mundial al haberse producido notables descensos productivos en los principales países de la cuenca mediterránea, sobre todo en Italia, Grecia, Portugal, Túnez o Marruecos, entre otros, reseña EFE.
España va a producir en esta campaña en torno al nueve por ciento menos respecto a la anterior, en la que obtuvo 1.401.000 toneladas de aceite de oliva, mientras que la producción mundial menguará en más de 600.000 toneladas, un descenso que se cuantifica en la órbita del veinte por ciento.
La campaña oleícola ha rebasado ya su ecuador y ha comenzado en este mes de abril su segunda parte con precios que se mantienen estables en el mercado de origen (cerca de los cuatro euros el kilo de media para la calidad virgen extra) y en el que las existencias en España están por debajo de las 900.000 toneladas (894.000 se cuantificaban a finales del pasado mes de marzo).
La incógnita ahora está centrada en conocer si se producirán tensiones de precios en las próximas semanas a la vista de la disponibilidad de aceite de oliva existente para abastecer el mercado y de cómo vendrán dadas las expectativas de la próxima cosecha, que ya se está conformado con la inminente floración y la posterior polinización, que darán paso a finales del próximo mes de junio al cuajado definitivo del fruto.