El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha hecho este miércoles una defensa de su legado normativo y se ha opuesto en el Congreso a derogar sus leyes polémicas, aprobadas por la mayoría absoluta que tuvo el PP y cuestionadas ahora por la Cámara.
Rajoy ha respondido en la sesión de control al Gobierno en el pleno del Parlamento al portavoz del PSOE, Antonio Hernando, que expresamente le ha hablado de la ley de seguridad ciudadana, conocida como ley mordaza, y la reforma laboral. El actual Congreso ha aprobado ya proposiciones no de ley o mociones pidiendo la derogación de ambas normas, pero seguirán en vigor hasta que no sean sustituidas por otras.
El presidente del Gobierno ha empezado por asegurar que será "respetuoso" con las resoluciones de la Cámara en el ejercicio de sus competencias. "Y pido que también lo sean con las del Gobierno, pero ustedes sabrán lo que les conviene".
"Derogar todas las normas, muchas de las cuales tienen efectos positivos, no es la mejor manera de construir ni hacer una aportación al interés general", ha asegurado el presidente del Gobierno.
En defensa de la ley mordaza, Rajoy ha asegurado que "es una broma decir que España tiene un problema de libertad de expresión o de derecho de manifestación", y que nadie nunca le ha dicho fuera del Congreso "ni una sola palabra de este asunto".
Según ha explicado, las denuncias por manifestaciones sin permisos son el 0,02% del total y la mayoría se refieren a delitos de drogas y tenencias de armas y explosivos. "Ustedes están sobreactuando y alejándose de la moderación, que es donde está el sentido común y el interés de todos", ha concluido.
El socialista Hernando se ha comprometido a modificar esas normas y ha asegurado: "No pierda el tiempo, señor Rajoy; si usted no quita la mordaza, la quitaremos nosotros".
Para cambiar esas normas será necesario aprobar proposiciones de ley con el acuerdo de al menos tres grupos parlamentarios, si se excluye al PP, tras un largo proceso legislativo.
Hernando ha hablado de "ideología represiva" en la ley mordaza. Ha asegurado que se han abierto 6.000 procedimientos por falta de respeto a policías, denuncias por llevar una mochila, multa de 800 euros por hacer una foto a un coche o identificaciones, entre otros efectos negativos de la norma.
Con información de El País