La «Operación diálogo» abierta por el Gobierno en Cataluñaha protagonizado la sesión de control en el Pleno del Senado. El presidente Mariano Rajoy ha expuesto a la antigua Convergencia una lista de materias sobre las que el Gobierno quiere hablar con la Generalitat, y ha enviado un consejo a la Generalitat y a Carles Puigdemont: huir de los extremismos de la CUP.
«Huyan de quienes quieren acabar con todos. Huyan de los extremistas, de los que desean y buscan el enfrentamiento. Por ahí no van a ninguna parte«, ha advertido Rajoy, quien ha tenido la mano a la antigua Convergencia para hablar de los problemas reales de los ciudadanos.
Ha sido el senador Josep Lluis Cleries i González, del Pdecat, en el Grupo Mixto, quien ha planteado a Rajoy una pregunta sobre el contenido del diálogo que ofrece el Gobierno. La exposición de la pregunta tenía cierta trampa, porque el senador se ha dedicado a dirigir reproches y agravios al presidente del Gobierno, y a dejar claro, una vez más, que lo que quieren es un referéndum por la independencia sí o sí.
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Rajoy le ha replicado que con reproches y agravios es un poco difícil avanzar en nada. «Si alguien busca el enfrentamiento, a mí no me van a encontrar. Yo busco el acuerdo, ha subrayado el presidente.
El presidente ha tendido la mano sobre asuntos como los Presupuestos, Europa, el Brexit, la integración europea, la lucha contra el fraude, las inversiones o de las pensiones. Rajoy ha insistido en que no ve justo que pongan como termómetro del diálogo un único punto, como es el referéndum. El planteamiento del sí o sí deja, según Rajoy, poco margen para poder hablar.
El senador independentista ha exigido diálogo bilateral, sin condiciones ni líneas rojas, y ha señalado que su grupo quiere hablar de todo, incluido el referéndum.
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El senador socialista José Montilla, expresidente de la Generalitat, también ha preguntado al Gobierno por el diálogo en Cataluña. Se ha felicitado por el «cambio de actitud» del Ejecutivo, pero le ha pedido que pase de las palabras a los hechos y acomete una reforma constitucional.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha recordado que cuando el PP y el PSOE han ido de la mano en los grandes asuntos, han acertado, y ha explicado que el Gobierno quiere hablar de los problemas reales de Cataluña ofreciendo diálogo y lealtad, y pidiendo lo mismo.
Con información de: ABC
