Un confuso comunicado de 12 páginas se emitió cuando durante la semana pasada surgieron nuevos cuestionamientos sobre un posible juicio penal contra el expresidente Donald Trump por tratar de anular las elecciones de 2020.
El Político
Dicho comunicado contenía la habitual combinación de sus aseveraciones estrafalarias, exageraciones y rotundas mentiras, pero también algo que los aliados de Trump y los expertos jurídicos señalaron como llamativo y diferente: el inicio de una defensa jurídica.
Casi en todas las páginas, Trump daba explicaciones de por qué estaba convencido de que le habían hecho trampa en las elecciones de 2020 y por qué tenía todo el derecho de cuestionar los resultados a través de cualquier medio disponible, reportó The New York Times.
Trump justificó los ataques al Capitolio
Trump escribió que lo que ocurrió en el Capitolio el 6 de enero de 2021 fue resultado de un intento de los estadounidenses “de responsabilizar a las autoridades electorales por las claras señales de actividades delictivas a lo largo del proceso electoral”.
Esta aseveración, aunque infundada, tenía especial significado debido al creciente interés acerca de si enfrentaría acciones penales.
Si el Departamento de Justicia entablara un juicio en su contra, los fiscales tendrían que demostrar que él sabía —o debía haber sabido— que su postura se basaba en afirmaciones falsas sobre un fraude electoral generalizado o que su intento de impedir la certificación de los resultados por parte del Congreso era ilegal.
Posible defensa
Como una posible defensa, la táctica presente en el comunicado de Trump está lejos de ser una garantía para que no lo procesen y tiene problemas de credibilidad evidentes.
Trump cuenta con un largo historial de que es capaz de decir lo que sea con tal de lograr sus objetivos, sin importar si es verdad o no.
Y algunas de las medidas que tomó después de las elecciones de 2020, como presionar a las autoridades de Georgia para que encontraran los votos suficientes como para cambiar el resultado en ese estado a su favor, habla de un intento decidido de mantenerse en el poder y no de abordar algunos puntos débiles más generales percibidos en el sistema electoral.
Pero su continua sarta de mentiras pone de manifiesto algunas de las dificultades para entablar cualquier proceso penal en su contra, a pesar de lo bien establecidos que están en este momento los hechos primordiales.