El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, culpó hoy de la caída de la lira en las últimas semanas a una maniobra para debilitar al país y sostuvo que los especuladores que tratan de socavar la divisa nacional no eran diferentes de "terroristas".
"Todo el mundo sabe que los ataques a los que Turquía está sometida tienen también un aspecto económico", dijo el jefe de Estado durante un discurso ante delegados de la administración local, en el que analizó la amenaza terrorista que sufre Turquía.
"Desde el punto de vista del objetivo, no hay diferencia entre los terroristas que enarbolan armas y bombas y los terroristas que utilizan dólares, euros y tipos de interés", sostuvo Erdogan, según recoge el diario Hürriyet.
"El objetivo es poner a Turquía de rodillas, hacer que se rinda, alejarla de sus metas. Para ello utilizan el cambio de divisas como arma", aseguró.
La lira turca, que lleva años depreciándose de forma paulatina, ha acelerado su caída desde octubre, hasta el punto de perder en cuatro meses un 20 % de su valor y superando esta semana la histórica marca cambiaria de 4 liras por euro.
Los analistas consideran que las dudas sobre el crecimiento sostenible del país, la inestabilidad política y el deterioro de la seguridad, con numerosos atentados en el último año, son los responsables de la depreciación en los últimos meses.
Desde esta mañana, no obstante, la lira ha experimentado una ligera subida, si bien los economistas turcos creen que solo una fuerte subida de los tipos de interés puede frenar la caída a medio plazo.
Erdogan siempre se ha opuesto de forma rotunda a esta medida, y ha pedido que se bajen los tipos para incentivar el crecimiento, aunque los expertos temen que esto solo aumentaría la inflación.
El mandatario aseveró que desde julio, muchos ciudadanos han cambiado sus reservas de dólares por liras, con ánimo de frenar la caída, y pidió que también el Banco Central y las demás entidades financieras "tomen posición para romper el juego" de la especulación.
"El Banco Central tiene la posibilidad y capacidad de tomar medidas. Hoy es el día de hacer sacrificios. Repito mi llamamiento al mundo empresarial: el día de invertir, de producir, de subir el empleo, de mover las ruedas. Si hoy no corréis riesgos, mañana no quedará nada por lo que arriesgar", afirmó.
Erdogan no dijo quién era el culpable de esa supuesta maniobra contra Turquía, si se refería a potencias extranjeras o a especuladores privados.
Esta semana la agencia de clasificación de riesgo Moody’s advirtió de que el deterioro de la situación de seguridad -con numerosos atentados en los últimos meses- tendrá un impacto negativo en la economía y causará un "empeoramiento general del clima inversor".
Algunos analistas también muestran preocupación por la interferencia, cada vez mayor, de Erdogan en la política monetaria, con presiones sobre el Banco Central para que baje los tipos de interés.
Con información de EFE