Una situación "delicada" atraviesa el mercado petrolero mundial. La oferta y la demanda se manejan bajo criterios que no están tomando en cuenta la red de inventarios, cuya única solución pareciera estar en la capacidad ociosa que posee la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
El Político
Aunque EEUU, Canadá, Rusia, Brasil o Noruega producen grandes cantidades de crudo, no están en capacidad de incrementar su producción en un laso de tiempo corto.
¡Ahí viene China!
Según las agencias petroleras, se prevee un sólido crecimiento de la demanda mundial de petróleo, con una contribución significativa de China, y muchos operadores piensan que esto podría volver a situar al mercado en déficit a partir de junio e impulsar al Brent de nuevo por encima de los $ 100.
Sin embargo, si el mercado del petróleo resultara ser más débil de lo que la mayoría prevé, la OPEP debería ser capaz de poner un piso a los precios, dado su fuerte poder de fijación de precios.
La OPEP podría mantener su producción a la baja mucho más allá de su reunión del 4 de junio o aplicar nuevos recortes. El cartel sigue siendo una pieza fundamental en el mercado petolero, cada día más parecido a un rompecabezas.
Datos aportados por el portal mexicano El Economista, afirman que la OPEP está aplicando un recorte de producción de dos millones de barriles, con el objetivo de mantener el precio del crudo relativamente alto.
Sin embargo, la economía de China se está reabriendo, y se incrementan las sanciones a la Federación Rusa, por lo que el petróleo de la OPEP pasa a ocupar un papel preponderante.
Informe de la AIE
La Agencia Internacional de la Energía espera que este 2023 se marque un récord histórico de demanda y consumo de petróleo, mientras que los inventarios se encuentran por debajo de la media móvil de los últimos 5 años.
Es decir, hay sed de petróleo en el mundo y el crudo de reserva por si hay desequilibrios entre oferta y demanda es muy bajo.
Por ello, los países que tienen capacidad para incrementar la producción cobran una gran importancia, aunque sea de forma temporal. Esos países forman parte de la OPEP.
Conclusión: Faltará petróleo en el mundo
La Agencia Internacional de la Energía (AIE) explicaba en su último informe mensual, que aunque la oferta mundial de petróleo estaba a punto de superar la demanda en el primer trimestre de 2023 y podría mantenerse equilibrada en el segundo trimestre, "todo hace indicar que se desarrollará un déficit sustancial de crudo durante toda la segunda parte de 2023 a medida que la demanda avance a toda velocidad".
Esto pondrá el foco la capacidad de producción adicional u ociosa de los productores, asegura la AIE: "La mayor parte de la producción ociosa actual está en manos de Arabia Saudí, junto con los Emiratos Árabes Unidos."
"Se proyecta que la capacidad disponible efectiva, excluyendo los volúmenes bloqueados por las sanciones a Irán y Rusia, alcance un promedio de 3,5 millones de barriles diarios en 2023″.
Esto deja al mundo una vez más en manos de la OPEP.
La OPEP tiene dos opciones: mantener los recortes y ganar más dinero por cada barril de petróleo vendido o aprovechar la escasez para ganar cuota de mercado.
Seguro que los expertos estudiarán que opción es más rentable a corto y largo plazo para tomar una decisión. No obstante, para la economía global sería positivo que la OPEP incrementase su producción de crudo para evitar que el peaje energético lastre la actividad económica.
Sin embargo, la OPEP no siempre ha empatizado con los países importadores de crudo, más bien al contrario.